El CES pide “no satanizar” el fracaso social para reformar los convenios
MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El presidente del Consejo Económico y Social (CES), Marcos Peña, ha exigido “no satanizar” el fracaso de las conversaciones entre sindicatos y empresarios para reformar la negociación colectiva, que finalmente aprobó el Gobierno por decreto, al tiempo que ha desechado que la CEOE decidiera no suscribir un pacto a la espera de que el PP llegue a La Moncloa.
“No hay que buscar culpables ni una explicación conspirativa”, sentenció Peña en un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum, a lo que agregó: “Lo más simple es que la CEOE no firmara porque no estaba de acuerdo, no por el PP. Huyo de la conspiración”.
El presidente del CES relativizó sobre la importancia de atajar el absentismo y reformar las mutuas, que el Gobierno no ha recogido en el decreto sobre los convenios, al considerar que se trata de un asunto “que hay que arreglar”, pero que en caso contrario no llevaría al “abismo”. “Hay que cambiarlo, pero sin dramatismos”, expresó.
En un repaso de la situación económica, que tras tres años en crisis “es más que una crisis”, Peña incidió que pese a que la destrucción de empleo se ha atenuado en el último año, España se adentra en un “clima de abatimiento y depresión social”.
En este sentido, volvió a advertir de que la recuperación de las tasas de paro previas a la crisis, del entrono del 8% de la población activa, se prolongará diez años, lo que, según dijo, supondría la creación de 350.000 nuevos puestos de trabajo al año durante la próxima década.
Por ello, el presidente del CES puso en valor el papel que juega el “crédito” político para “reanimar” a la sociedad, e instó al “entendimiento” entre los grandes partidos políticos. Como ejemplo, la reducción del número de horas perdidas por huelga en 2010, lo que consideró un “alivio” y atribuyó a los agentes sociales.
“Vivimos peor, que duda cabe”, lamentó, para después valor el “buen camino” en la consolidación fiscal, con una reducción del déficit público de 19.000 millones de euros en 2010, ante un compromiso “no alegre y que a nadie satisface”. “El postoperatorio va a ser doloroso. Hay que aceptarlo”, avisó.
'COPAGO' SIN DRAMATISMOS
En cuanto al sistema sanitario, Peña no escatimó en elogios: “Es una joya de la corona”, pero también lanzó una advertencia: “Conviene no empeñarla”. Por ello, reclamó contemplar el 'copago' “sin dramatismos viscerales”. “El copago es un debate viciado, con aura milagrosa de que va a resolver los problemas de financiación”, indicó.
“El sistema sanitario tiene que estar garantizado porque es vital y hay que hacer lo que sea para que el sistema viva bien y pague sus deudas” explicó.
El presidente del CES se refirió también al movimiento 15-M para reivindicar la clase política, porque parece “que todo nos ha caído del cielo”, y subrayó que los partidos son necesarios para que la sociedad “sufra menos”.
“Lo progresista es pasar de 65 a 67 años porque me interesa y creo en el sistema”, indicó en alusión al retraso en la edad de jubilación, para terminar concluyendo: “La indignación es una coartada moral que funciona poco”.