Las terrazas de la capital grancanaria ubicadas en suelo público podrán poner música si no molestan a los vecinos

El Pleno del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha aprobado este viernes de forma definitiva la nueva ordenanza reguladora de la instalación de terrazas en el suelo público con algunas modificaciones como la ampliación del plazo de vigencia de la autorización de dos a cuatro años.

La nueva norma insiste en que los supuestos de negación, revocación o suspensión de licencias deberán estar siempre motivados por la administración, algo que ofrecerá mayor garantía a los concesionarios, destaca un comunicado del Consistorio capitalino.

Además, las terrazas deben compatibilizar el derecho al ocio con el de descanso de los vecinos para garantizar que Las Palmas de Gran Canaria sea una ciudad accesible e inclusiva para todos.

La ordenanza reguladora de la terraza en suelo público introduce directrices en materia de accesibilidad y simplifica el procedimiento de tramitación y de resolución de la autorización.

El texto también amplia el marco de establecimientos autorizables, plantea la regulación de espacios con ordenación singular, como zonas peatonales y espacios situados en el ámbito de un conjunto histórico y, en este último caso, la solicitud de la terraza tendrá que ratificarse por el Consejo Municipal de Patrimonio Histórico.

La ordenanza establece además la declaración por parte del Ayuntamiento de zonas saturadas, espacios de la ciudad en los que no se podrá autorizar la instalación de nuevos elementos que supongan un aumento del aforo de terrazas existentes.

Se considerarán zonas de saturación las en las que ya se registre un excesivo número de terrazas y sillas o esté afectado el descanso vecinal por las condiciones acústicas y ambientales del espacio.

La nota recuerda que el Consistorio mantuvo una ronda de reuniones con los partidos de la oposición, plataformas vecinales y los empresarios del sector para informarles de los detalles del nuevo texto y escuchar, asimismo, sus demandas y peticiones.

Esta nueva norma incluye algunas de las enmiendas presentadas, como que las autorizaciones dispondrán de un plazo de dos años, a partir de la entrada en vigor de la ordenanza, para adaptarse a ella o la ampliación a cuatro años de las autorizaciones.

El Ayuntamiento incorpora, atendiendo a una propuesta del servicio de Limpieza, la no colocación de anclajes fuera de la superficie autorizada de terraza y que exista un espacio suficiente que permita el paso de los operarios y del agua de lluvia.

Otra de las novedades es la posibilidad de conceder licencias de terrazas con música a locales situados en lugares en los que no se ocasione molestias a los vecinos por ruidos, como polígonos industriales.