El Colegio de Médicos rechaza la alimentación forzosa a Haidar
El Colegio Oficial de Médicos de Las Palmas “rechaza” la posiblidad de que la activista saharaui, Aminatou Haidar, pueda ser alimentada de manera forzosa “aún cuando no esté consciente” después de que fuera ingresada la madrugada de este miércoles en el Hospital de Lanzarote.
El presidente del Colegio, Pedro Cabrera, leyó este jueves un comunicado del Colegio en el que se destaca que “hay suficientes evidencias para probar la voluntad de Haidar de no ser alimentada incluso cuando no pueda expresarlo”, aunque al mismo tiempo el documento reconoce que “desconocemos si existen instrucciones previas con los requisitos que exige la ley”.
El Colegio basa su pronunciamiento en los principios recogidos en la ley de Autonomía del paciente y en su propio Código de Ética y Deotología Médica. Cabrera recordó que “la ley de Autonomía del paciente prohibe a los médicos instaurar tratamientos en contra de la voluntad de un paciente mayor de edad y en pleno uso de sus facultades mentales” y que “si esta voluntad se manifiesta en instrucciones previas por escrito y depositadas en el registro nacional, se prohibe practicar cualquier tratamiento si llegan a acontecer circunstancias que impidan expresar la voluntad del paciente”.
El presidente de los médicos de Las Palmas recordó que el Código Ético y Deontológico del Colegio dice que “el médico en ningún caso abandonará al paciente que necesitara su atención por huelga de hambre y respetará la libertad de los pacientes con capacidad mental conservada”.
En la declaración colegiada, los 4.300 médicos de la provincia recomiendan a los profesionales que atiende a Aminatou Haidar que “estén siempre disponibles de forma inmediata” por si la activista requiere sus servicios. Además recuerdan que la alimentación forzosa implica siempre una sedación muy profunda si se quiere evitar que el paciente pueda retirarse las sondas y las vías intravenosas porque la pérdida de conciencia no suele ser permanente y estable y, al alternarse con espacios de consciencia, “en ocasiones hay que atar al paciente a la cama de pies y manos”
Cabrera concluyó anunciando que en el caso de que alguna instancia en el ámbito de la Justicia tomara una decisión diferente el Colegio “se volvería a replantear su posición estrictamente deontológica”.