Los españoles detenidos en el Chad comparecen ante la Justicia
Los dieciséis europeos detenidos en el Chad comparecieron este sábado por primera vez ante un tribunal de Yamena para declarar sobre la operación de traslado irregular de 103 niños hacia Francia, que las autoridades de Yamena han calificado como un rapto.
Se trata de seis franceses integrantes de la organización no gubernamental El Arca de Zoé, siete españoles miembros de la tripulación del avión fletado por la ONG y tres periodistas franceses.
El abogado de uno de los acusados, Jean Padaré, confirmó que los dieciséis europeos comparecieron durante la jornada de hoy para declarar en el Palacio de la Justicia de esta capital, aunque no concretó el contenido de las sesiones.
“Todo es favorable para la liberación de los tres periodistas y para la extradición de los españoles”, dijo Padaré, que se mostró optimista con el desarrollo del proceso.
Fuentes vinculadas con el caso distinguen entre los seis franceses integrantes de la ONG, a los que se acusó de rapto de menores y estafa, y los españoles y los periodistas, que se enfrentan a cargos de complicidad con este mismo delito.
Está previsto que el lunes los magistrados chadianos den a conocer la decisión judicial tras la comparecencia de este sábado, pero las fuentes de la defensa no adelantaron qué podría pasar.
Además hay un piloto belga detenido en la antigua prisión de Yamena, aunque no está claro si está directamente vinculado a la misma operación.
Otros cuatro chadianos acusados también de cómplices se espera que comparezcan a partir del lunes ante los tribunales.
Dos de ellos fueron detenidos en la localidad oriental de Abéché y se trata de funcionarios locales que presuntamente estaban al tanto de la operación y la permitieron.
El caso del El Arca de Zoé se conoció el pasado 25 de octubre, cuando los 16 europeos fueron detenidos en Abeché en el momento en que se disponían a abandonar el Chad con un centenar de niños.
La organización pretendía sacar a los menores presentándolos como huérfanos procedentes de la región de Darfur, en el vecino Sudán, para ponerlos en adopción.
Pero las organizaciones internacionales que se hicieron cargo de ellos tras el arresto aseguran que la mayoría de ellos son naturales de Chad y tienen familiares en este país.
Una semana de espera
Los detenidos fueron trasladados este viernes desde Abeché, que se encuentra a unos 700 kilómetros de la capital, hasta Yamena, tras haber pasado más de una semana esperando ser trasladados y juzgados.
Las autoridades de Abeché realizaron el traslado hasta el aeropuerto de forma discreta y sorpresa para evitar disturbios en la ciudad, ya que la población reclamaba desde hace días que los acusados fueran acusado en esa localidad.
La justicia chadiana castiga con la pena de trabajos forzados a los considerados culpables de rapto de menores, y las condenas pueden llegar a ser de hasta 20 años.
Mientras los detenidos prestaban declaración ante la justicia, la organización Reporteros sin Fronteras (RSF) abogó en favor de los tres periodistas e insistió en que “cubrir un hecho no es sinónimo de avalarlo”.
El secretario general de RSF, Robert Ménard, afirmó en una rueda de prensa en esta capital que es “inadmisible” que los periodistas hayan sido detenidos por hacer un reportaje sobre esta “historia loca”.
“La justicia chadiana no debe ejercer presión sobre quienes quieran arrojar luz sobre esta situación”, agregó Ménard.