Líderes opositores sirios piden ayuda a la comunidad internacional
ESTAMBUL, 26 (Reuters/EP)
Varios líderes opositores sirios que se han reunido este martes en Estambul han pedido ayuda a la comunidad internacional para convencer al presidente de Siria, Bashar al Assad, de que ponga fin a la campaña de represión de las protestas a favor de la democracia.
“Si nuestros amigos de Occidente, Turquía y el mundo árabe quieren ayudarnos, lo pueden hacer (...) ejerciendo presión sobre el régimen sirio para que deje de atacar a los civiles”, ha dicho Anas Abdah, presidente del Movimiento para la Justicia y el Desarrollo, a la agencia Reuters.
Abdah ha hecho estas declaraciones al margen del encuentro de este martes en Estambul, en el que han participado grupos opositores y de defensa de los Derechos Humanos y que fue organizado por ONG turcas.
“Parece que Bashar al Assad ha tomado la decisión estratégica de aplastar un movimiento no violento ordenando a su hermano Maher al Assad (...) que vaya a Deraa y la asalte”, ha señalado Abdah, que vive en Reino Unido. Maher, considerado el segundo hombre más poderoso de Siria, dirige la Cuarta División, una especie de fuerzas especiales militares.
Cientos de personas han muerto a manos de las fuerzas de seguridad en Siria desde el comienzo de las manifestaciones a favor de la democracia, hace seis semanas. El asalto contra Deraa (sur), el centro de las protestas, se produjo este lunes.
DIVISIONES EN EL EJÉRCITO
El presidente del Movimiento para la Justicia y el Desarrollo ha dicho haber recibido informaciones que apuntan a que varios oficiales de una división del Ejército distinta a la de Maher --desde capitanes hasta un teniente general-- han intentado impedir que la Cuarta División entre en la ciudad.
“En este momento, tenemos informaciones de que algunos miembros de la Quinta División no están respondiendo de la manera que Bashar y Maher quieren que lo hagan y se han puesto de lado del pueblo”, ha asegurado.
La Quinta División tiene su cuartel general en el sur de Siria, y entre sus filas hay muchos suníes. Siria ha estado controlada durante casi cinco décadas por los alauíes, una minoría próxima al chiismo, y la mayoría de los oficiales del Ejército son alauíes, aunque la mayor parte de los soldados son suníes.
Rabhan Ramadan, un sirio kurdo que vive en Austria y trabaja para la Fundación Haitan Maleh, con sede en Bruselas, ha subrayado que “el Ejército sirio es un Ejército nacional” y por ello “al final apoyará al pueblo”. “Ahora estamos empezando a ver que algunos miembros del Ejército se niegan a disparar. Es solo el principio, pero esperamos que cada vez sean más”, ha añadido.
VÍCTIMAS MORTALES
Abdah ha explicado que está en Estambul como representante de los firmantes de la Declaración de Damasco de 2005, en torno a la cual se ha agrupado la oposición siria y que tiene un programa de reformas políticas y económicas. “Pero en este momento todo esto es irrelevante y no tiene sentido si el régimen sirio sigue atacando a civiles”, ha resaltado.
Sawasiah, una organización siria defensora de los Derechos Humanos, ha cifrado en al menos 400 las víctimas mortales de la represión en toda Siria. Pero el presidente del Comité Sirio de Derechos Humanos, Walid Saffour --que vive en Londres--, ha afirmado que los fallecidos son más de 700 y que 5.000 personas han sido arrestadas.
Las autoridades sirias han expulsado a la mayoría de los periodistas extranjeros, por lo que resulta imposible contrastar los datos con fuentes independientes.
Por otro lado, Saffour ha añadido que, según sus datos, al menos un soldado ha sido ejecutado por negarse a disparar a civiles en Deraa y que varios oficiales y soldados han huido a Jordania para solicitar asilo. “La situación es espantosa”, ha opinado.