Parlamento catalán envía un escrito al TC para que se declare incompetente
BARCELONA, 26 (EUROPA PRESS)
El Parlamento de Cataluña ha enviado al Tribunal Constitucional (TC) un escrito redactado por sus diez letrados en el que pide que se declare incompetente para dictar sentencia sobre el Estatut, ya que su situación actual “podría incluso llegar a calificarse como irregular o viciada”, puesto que se quebrantan los principios de independencia e imparcialidad que deben guiar su actuación.
El escrito, recogido por Europa Press, indica que su solicitud de incompetencia “no es una táctica dilatoria del procedimiento”, y ve anómala la actual composición del Tribunal, con cuatro miembros con mandato prorrogado desde 2007 y dos vacantes, una por fallecimiento y otra por recusación.
“Las condiciones que aseguran la independencia e imparcialidad del TC se han visto afectadas gravemente. La capacidad de juzgar objetivamente ha resultado menoscabada”, argumenta el texto, que considera que el Alto Tribunal debe evitar cualquier sospecha en su actuación siendo escrupuloso al máximo.
La existencia de 'bloques' --“lo cual parece confirmarse cuando el alineamiento de unos magistrados con otros se repite a menudo, sea cual sea la cuestión sometida a su consideración”-- no es lógica, según la cámara, y podría inducir a pensar que existen criterios extrajurídicos en estas actuaciones, algo que el TC debe evitar.
También deberían ponerse límites a las filtraciones, ya que sus deliberaciones deben ser secretas, por lo que su difusión proyecta a la opinión pública la imagen de un Alto Tribunal “marcada por la politización, con la consiguiente pérdida de confianza ciudadana”, se añade.
En cualquier caso, si el TC se declara incompetente, el texto cree que el órgano no abdicaría de sus responsabilidades, sino que reconocería que la situación actual no permite resolver los diversos recursos en las condiciones adecuadas.
El escrito lo firman los diez letrados del Parlament, y se envió tras una reunión extraordinaria de la Junta de Portavoces de la cámara antes de empezar el pleno de hoy, lo que permite cumplir el acuerdo que alcanzaron tripartito y CiU el 29 de abril.
VULNERACIÓN “FLAGRANTE”
Para el Parlament, la Constitución establece que los miembros del TC deben renovarse de forma temporal, por lo que la composición actual vulnera de forma “clara y flagrante” este principio constitucional y eso afecta a su legitimidad.
Por todo ello, en el TC se da una “pérdida de las condiciones necesarias” para garantizar que cumpla con los requisitos de independencia e imparcialidad, y también se dificulta la obligación que tienen los tribunales de inspirar confianza. Además, el escrito considera que el TC no debe pronunciarse sobre leyes que han sido refrendadas, y si lo hace, se produce una clara extralimitación de sus funciones.
La renovación del TC --un tercio de sus miembros cada tres años-- que establece el artículo 159.3 de la Constitución es una “obligación”, por lo que su situación actual incumple la ley, asegura el Parlament, porque además, el carácter temporal de los nombramientos dan legitimidad al órgano.
Así, la composición actual no queda amparada por la Carta Magna, siendo una “vulneración directa y frontal de la Constitución, en cuanto desdibuja gravemente el modelo de órgano diseñado por la misma”.
“Cuando las caducidades de mandatos son tan ostensibles y numerosas debería primar un principio de prudencia institucional en la toma de decisiones, y más cuando éstas afectan a una norma de la trascendencia del Estatuto de Autonomía”, agrega el documento.