Uriarte, “dolido” por las críticas de “equidistancia” con las víctimas de ETA
BILBAO, 24 (EUROPA PRESS)
El obispo de San Sebastián, Juan María Uriarte, afirmó este jueves que “la paz verdadera” lleva consigo “la pacificación, la concertación política y la reconciliación, que es imposible sin buscar toda la verdad, sin practicar la justicia y sin ser capaces de perdonar y de pedir perdón”. Asimismo, se mostró “dolido” por las críticas contra la Iglesia de “equidistancia” con las víctimas del terrorismo, y aseguró que ha “fustigado fuertemente, cientos de veces, el desatino de ETA”.
En una entrevista concedida a ETB, recogida por Europa Press, Uriarte dijo que, en relación a la consecución de la pacificación en Euskadi, “más que de optimismo hablaría de esperanza”.
Tras precisar que no es “analista político” y no tiene “datos de primera mano para saber si la cosa está más cerca”, consideró que “la paz verdadera, la paz sólida y estable, lleva consigo una trilogía: por una parte la pacificación, por otra parte la concertación política y por otra parte la reconciliación”.
Uriarte, que el próximo 9 de enero dejará el Obispado, deseó que “pronto se nos acabe, cuanto antes, este jueves mejor que el viernes, la pesadilla de ETA” y esperó también que “esta sociedad encuentre unas fórmulas para vivir de una manera consensuada y unida”.
Asimismo, dijo esperar “que exista una reconciliación” que, a su juicio, “es imposible sin buscar toda la verdad, sin practicar la justicia y sin ser capaces de perdonar y de pedir perdón”.
VICTIMAS
Por otro lado, aseguró que le han “dolido mucho” las críticas de “equidistancia” de la Iglesia vasca con las víctimas y lamentó que “se ha dicho más, más que equidistante, se ha dicho que estábamos mas cerca de los verdugos que de las víctimas y esto no sé de dónde se puede decir”.
En ese sentido, recordó que él ha presidido “todos los funerales que se han celebrado con respecto a las víctimas de ETA” y ha “fustigado fuertemente, con palabras enérgicas no una vez, sino cientos de veces, el desatino de ETA”.
Asimismo, aseguró que ha mostrado su “identificación” con las víctimas y las ha visitado. “Naturalmente, yo no he llamado a los periodistas para que vengan detrás de mí y me saquen de una foto cuando voy a visitar, pero he visitado a un montón de víctimas”, insistió.
“Por el hecho de que en ocasiones uno haga una alusión al sufrimiento de los familiares de los presos, que son 700 en el País Vasco, o por el hecho de que uno haga alusión a que es preciso respetar los derechos humanos intangibles de las personas, aunque sean los mayores criminales del mundo, ¿eso qué es?, ¿es inclinación hacia ETA y sus secuaces o es humanismo?”, se preguntó. En su opinión, es “humanismo, que nace del Evangelio y de la fe, y eso es lo que he intentado hacer”.