Nueva Canarias cree que la ponencia que estudia la Ley del suelo confirma la ruptura de un proyecto común para Canarias
El portavoz adjunto de Nueva Canarias (NC) en el Parlamento, Luis Campos, ha afirmado este viernes que la ponencia que estudia el proyecto de ley del Suelo ha consumado la ruptura de un proyecto común para Canarias al aprobar la derogación de la mayoría de las directrices generales de ordenación del territorio.
Campos, en un comunicado, indica que tras concluir este viernes el primer análisis de los 408 artículos, 50 disposiciones del proyecto de ley y 553 enmiendas parciales presentadas, lo peor ha sido la derogación de las directrices.
El diputado de Nueva Canarias ha señalado que los votos de CC, PP y ASG han evitado que se aprobara la enmienda presentada por Nueva Canarias destinada a suprimir la disposición derogatoria con la que se eliminan la mayoría de las directrices.
Con esta enmienda se pretendía que se mantuviera la norma de mayor rango de la comunidad hasta que, como prevé el proyecto de ley, se hicieran unas nuevas directrices, explica el parlamentario.
Lo positivo de la ponencia ha sido, agrega Campos, el “consenso logrado, aunque sin terminar de tomar la decisión final, para resolver un problema pendiente en décadas que es la regularización de las explotaciones ganaderas.
Explica que la ponencia, sin tomar la última decisión, avanzó en la consecución de un acuerdo para legalizar, con criterios de viabilidad, las 708 explotaciones ganaderas que, a finales del pasado año según los datos del Ejecutivo canario, estaban en una situación irregular en las islas.
En su opinión, lo más relevante de esta legislatura entró en el Parlamento “sin el consenso” social, institucional y político preciso, dadas sus importantes implicaciones para el futuro de las islas, y “se encamina hacia su votación final en el Parlamento, a pesar de las modificaciones acordadas que mejoran el texto inicial, con la misma división” generada en la sociedad.
Asegura que no habrá consenso porque se mantienen figuras “peligrosas que se saltan” el planeamiento vigente y alude a “puertas traseras” que posibilitan los proyectos de interés insular y autonómico, los convenios urbanísticos y las ordenanzas municipales e insulares.
Campos lamenta que ASG, el PP y CC no permitan retomar los amplios consensos y las unanimidades concitadas en torno a leyes anteriores determinantes sobre el territorio como la Ley de Espacios Naturales de 1994, la de Ordenación del Territorio de 1999 y la Ley de Directrices de Ordenación General y del Turismo de 2003.
