Barrios se compromete a culminar las obras de ampliación de la Catedral de Santa Ana
La candidata de Compromiso a la Alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria, Bernarda Barrios, dijo este viernes que si logra gobernar la ciudad tras las próximas elecciones obtendrá la financiación necesaria para culminar las obras de ampliación de la Catedral de Santa Ana.
De esta forma, Barrios se comprometió a llevar a la práctica el proyecto diseñado por el arquitecto Salvador Fábregas para ampliar el templo, del siglo XVIII, por su ala norte, unas obras que, tras iniciarse en 2002, se paralizaran al año siguiente debido al hallazgo de restos arqueológicos en su entorno.
“Me comprometo a conseguir la financiación necesaria para culminar con esta joya arquitectónica con la colaboración de La Caja Insular de Ahorros, el Cabildo, el Gobierno de Canarias y diversas asociaciones”, dijo Barrios en un comunicado.
Entre esas asociaciones, citó a la de Amigos de la Catedral y a la Real Sociedad Económica de Amigos del País en Gran Canaria.
Barrios recordó que hace dos años presentó una moción en la que se destacaba la necesidad de culminar con estas obras y que fue aprobada “por unanimidad” aunque “no se ha hecho nada hasta ahora”.
La presidenta de Compromiso aludió a la intención de la alcaldesa de la ciudad, Josefa Luzardo, de que Las Palmas de Gran Canaria sea incluida en la Red de Ciudades Catedralicias, constituida en febrero de 2006 en Plasencia (Cáceres) y en la que participan 13 localidades españolas: Sevilla, Cuenca, Salamanca, Burgos, Coria (Cáceres), Avila, León, Badajoz, Baeza (Jaén), Burgo de Osma (Soria), Córdoba, Zaragoza y Plasencia (Cáceres).
Además de Las Palmas de Gran Canaria, Jaén, Lérida y Alcalá de Henares (Madrid) han solicitado formalmente pasar a formar parte de esta organización.
Aunque coincidió con Luzardo en que la ciudad se incluya en esta red, Barrios criticó que la alcaldesa “no haya hecho nada para terminar con la catedral”.
El proyecto de Fábregas prevé la ampliación del templo con un edificio anexo destinado a fines socioculturales y religiosos y un plazo de ejecución de entre siete y diez años.