Un catedrático ve a Tenerife con argumentos suficientes para hacerse referente nacional en cultura masónica
SANTA CRUZ DE TENERIFE, 28 (EUROPA PRESS)
El catedrático y decano de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de La Laguna (ULL), Manuel de Paz, ha propuesto la creación de una ruta cultural de la masonería en Tenerife contando para ello con tres lugares estratégicos: el templo Masónico de la calle de San Lucas; el mausoleo del Marqués de la Quinta Roja y el Hotel Taoro, incluso las pirámides de Güímar.
“La ruta es coger y hacer como mínimo lo que es puramente masónico que sería el templo de la calle de San Lucas de Santa Cruz, luego saltar a La Orotava, al mausoleo de la Quinta Roja -- del arquitecto francés Adolphe Coquet, que también era masón-- y el Hotel Taoro de Puerto de la Cruz que era el modelo decimonónico de un templo de salomón y como broche estaría el tema de las Pirámides de Güímar que no son pirámides sino son majanos pero era una finca de un masón que yo lo incorporaría”, ha explicado De Paz en una entrevista concedida a Europa Press.
En opinión de este reconocido experto esta es una ruta cultural en Tenerife “pero que tiene valor para toda España”. Así, el edificio de San Lucas albergó la Gran Logia de Canarias, la Logia de Añaza 170 y también a varios organismos filosóficos vinculados a la masonería.
“Como tal organismo produjo una inmensa masa de documentación y se relacionó con la masonería de medio mundo, gran parte de ese material ha servido para luego reconstruir la historia de la masonería en partes de la Península donde para nada había documentación porque simplemente se destruyó durante la Guerra [Civil]”, ha argumentado el catedrático de la ULL.
Abundando más en este edificio propiedad municipal, y cuya restauración se ha anunciado durante años, De Paz ha apuntado que su valor “simbólico a escala nacional es muy elevado”. En este sentido ha insistido que es el “único templo masónico en España” y ha recordado, por ejemplo, que el que se había proyectado en la calle del Príncipe de Madrid “nunca” se llegó a construir y el “templillo” de Gijón fue destruido.
“Templo masónico puro y duro, ese y está aquí, además con la característica de que le incorporaron una serie de elementos de tipo egipciacos asimilándolo a una tradición creativa que tenía mucho que ver y que había en Escocia, porque el escotismo (rito Escocés antiguo y aceptado) se supone tiene su origen en Oriente”, ha afirmado Manuel de Paz.
“Arquitectónicamente, es una obra que refleja la maestría que ha alcanzado su autor [Manuel Cámara]... El clasicismo romántico muy sobrio de sus primeros trabajos fue dando paso a ciertas licencias decorativas que culminaron en edificios de mayor ornamentación, de los que la Logia es el ejemplo más extremo, impuesto por su significado específico”, han argumentado De Paz junto a Miguel Ángel Molinero en de 'El templo de la Logia de Añaza'.
UN MAUSOLEO A UN HIJO MASÓN
La literatura y el conocimiento popular ha asociado la construcción del Mausoleo de La Quinta Roja al “despecho” de la madre de José Ponte, marqués de La Quinta Roja, que vió como la Iglesia le negó que fuera enterrado en un camposanto.
La obra ejecutada por Coquet es la coronación del grado 30 de los 33 que tiene el rito, según el decano de la ULL. “La fábula de los templarios en el grado 30º, por su lado, comporta ritualmente ”una parte vindicativa, con puñales y cabezas de muertos, en la que se maldecía a los dos abominables, es decir, al papa Clemente V y al rey francés Felipe el Hermoso, destructores del temple“, y que ”el denso anticlericalismo del siglo XIX pronto hizo erigir a estos dos personajes como símbolos a su medida“, contribuyendo a ”alejar“ el origen cristiano y jacobita del grado”, ha escrito de Paz sobre este lugar sito en La Orotava en donde todos los elementos, incluso los jardines están llenos de lecturas con mensaje para quienes están vinculados a la masonería.
En cuanto al Hotel Taoro a pesar de las transformaciones --un incendio a principios del siglo XIX-- es el 'culmen' de la arquitectura salomónica. “En el siglo XVIII se creía que los hebreos habían aprendido las técnicas para la construcción en piedra de los egipcios. Así, el primer santuario que erigieron, el templo de Salomón, se habría levantado siguiendo esos conocimientos. Éste era el prototipo del edificio simbólico que los masones querían erigir con la nueva Humanidad y, más prosaicamente, el modelo para los edificios reales en los que se reunía la congregación de hermanos”, ha argumentado De Paz junto a Miguel Ángel Molinero.