Condenado a 7 años y un día de prisión el acusado de abusar sexualmente de su hija en Guía (Gran Canaria)
La Audiencia de Las Palmas le absuelve del delito de maltrato habitual
Tendrá que indemnizar a la menor con 10.000 euros
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 30 (EUROPA PRESS)
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas ha condenado a M.M. a 7 años y un día de prisión por abusar sexualmente de su hija de forma continuada en el domicilio familiar en Santa María de Guía, al norte de Gran Canaria.
La sentencia, dada a conocer hoy por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, condena al acusado como responsable penal, en concepto de autor, de un delito de abuso sexual continuado, así como le prohíbe aproximarse a la menor --que ahora tiene 17 años de edad-- o comunicarse con ella de cualquier forma, durante diez años.
Además, la Sala le impone la inhabilitación especial para el ejercicio de la patria potestad respecto a la menor por el tiempo de un año. Asimismo, le absuelve del delito de maltrato habitual por el que venía siendo acusado y le condena condenándole al pago de las costas procesales.
Igualmente, la resolución judicial --contra la que cabe interponer recurso de casación en el plazo de cinco días-- obliga a M.M. a indemnizar a la joven con 10.000 euros.
El procesado, de 42 años de edad, tiene antecedentes penales no computables a efectos de reincidencia, en cuanto que condenado por sentencia de 16 de enero de 2009, por el Juzgado de Instrucción número 3 de Santa María de Guía, por un delito de maltrato en el ámbito familiar, a la pena de seis meses de prisión y prohibición de aproximarse y comunicarse con la madre de la niña durante dos años.
La Audiencia declara probado que M.M. es el padre de la menor --nacida el 1 de marzo de 1993-- con la que convivía, en compañía de su esposa desde que la niña tenía doce años.
DESDE QUE LA NIÑA TENÍA 15 AÑOS
El procesado, pese a su condición de padre biológico de la menor, y valiéndose de esta cualidad, “con ánimo de satisfacer sus deseos libidinosos, ha venido manteniendo relaciones sexuales completas con la menor desde el mes de abril del año 2008, cuando la niña tenía quince años de edad”.
La Sala señala que el acusado abusaba “de la diferencia de edad, del ascendente que ejercía sobre ella por ser su padre y de la situación personal de la menor, quien presenta una inteligencia media-baja, con altísima deprivación cultural, que afecta tanto a nivel cognitivo como volitivo y conductual”.
Las relaciones sexuales se prolongaron hasta el mes de abril de 2009, fecha en la que la menor denunció los hechos.
Las secuelas que la adolescente presenta por estos hechos a nivel conductual, emocional y social son un bajo rendimiento académico, huida del hogar, baja autoestima y sentimientos de desconfianza generalizados, así como ansiedad y déficits en habilidades sociales.
Por último, la sentencia indica que no ha quedado acreditado que el procesado, de manera continua y reiterada, agrediera, insultara o amenazara a su hija.
“MI PADRE ERA SÓLO PARA MÍ”
Durante el juicio celebrado el pasado 17 de marzo, el hombre negó los hechos y alegó que ella “estaba obsesionada” con él “desde los quince años”. “Ella es la que quería mantener relaciones sexuales conmigo y yo le decía que no, por lo que ella se autolesionaba y día y noche me formaba escándalos en la vía pública, lloraba y gritaba si yo no accedía a sus pretensiones”, aseveró M.M..
Por su parte, en su declaración, la víctima admitió que las relaciones sexuales con su padre eran “consentidas”. Reconoció que ella en ningún momento le rechazó a él, pero que le infundía “respeto” y la “convencía”.
“Mi padre era sólo para mí y no para nadie más”, admitió, al tiempo que comentó que “los celos eran mutuos”, tanto de ella hacia su madre como por parte de ésta hacia la niña.