El Gobierno canario da otro paso más para restar competencias a la COTMAC
Agilizar trámites a costa del control y la participación social. El Ejecutivo autónomo ha dado un nuevo paso para restar competencias en materia de evaluación de impacto medioambiental a la Comisión de Ordenación del Territorio y del Medio Ambiente de Canarias (COTMAC), al ceder este órgano participado por otras administraciones y organizaciones sociales a la Viceconsejería de Medio Ambiente las valuaciones ecológicas en las áreas de sensibilidad.
La decisión tomada por la propia COTMAC el pasado 30 de enero fue hecha pública este martes por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación Territorial. Su nota oficial argumenta que el objetivo es agilizar los procedimientos, y lleva consigo una respuesta más rápida a los demandantes de proyectos que afectan a Áreas de Sensibilidad Ecológica.
La resolución por la que se hace público el acuerdo de la COTMAC indica que ésta puede reclamar las funciones delegadas para el conocimiento de un asunto concreto, cuando las circunstancias, de índole técnica, económica, social, jurídica o territorial, lo requieran, al tiempo que señala la obligatoriedad de comunicar a la Comisión las resoluciones que adopte sobre dicha materia.
El acuerdo establece que se excluyen las competencias relativas a la resolución de los expedientes administrativos en los que el viceconsejero haya dictado los actos objeto del recurso.
Un proceso de iniciado ya hace años
Fuentes consultadas por CANARIAS AHORA valoran esta nueva entrega de competencias como un paso más de un proceso iniciado hace años y que deberá concluir con la asunción del Ejecutivo de todos los casos de impacto medioambiental, en dirección opuesta a la normativa europea vigente desde 2006.
Se procede así a centralizar competencias en detrimento del control compartido por la Comunidad con otras administraciones públicas -cabildos y ayuntamientos representados en la COTMAC- o con asociaciones civiles -federaciones de ecologistas presentes en la Comisión- en el desarrollo urbanístico de las Islas y de la propia participación ciudadana por la que aboga la Unión Europea.
La decisión de la COTMAC no es novedosa. En este caso afecta a las denominadas áreas de sensibilidad ecológica. Sin embargo, ya en diciembre de 2004 procedió a delegar en la Viceoconsejería la competencia de evaluar el impacto medioambiental de proyectos urbanísticos cuando finalicen por desistimiento, renuncia al derecho en que se funde la solicitud, declaración de caducidad e imposibilidad material de continuarlo por causas sobrevenidas.
Desde 1996, la COTMAC ha ido delegando en los departamentos del Gobierno de Canarias diferentes competencias propias desde su constitución en 1990, como las competencias que correspondan a la Comisión como órgano ambiental en las Evaluaciones Detalladas de Impacto Ecológico.
También ha quedado en manos ejcutivas la adopción de la decisión de someter o no, al procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental a las obras, instalaciones y actividades no incluidas en el anexo I del Real Decreto Legislativo 1/2008, de 11 de enero, que aprueba el Texto Refundido de la Ley de Evaluación de Impacto Ambiental de proyectos, y que pueden afectar directa o indirectamente a los espacios de la Red Natura 2000.
