Inma Medina sobre LPGC: ''La ciudad está sucia''
Las quejas de varios colectivos ciudadanos y la constatación por parte del Gobierno municipal de que los alrededores de los contenedores de basura se habían convertido en sí mismo en un vertedero, ha llevado a Inma Medina, concejal de Limpieza de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria a informar en la junta de Gobierno del procedimiento que se está llevando a cabo con la empresa que presta el servicio de recogida de estos residuos, Clusa.
La decisión, entonces, no es otra que prescindir de sus servicios en favor de FCC, que se había presentado al concurso en 2003 pero salió perdedora. Un año después, esta segunda empresa presentó una mejora que es a la que se agarra el Consistorio para buscar una salida a la actual situación de desbordamiento de muchos de los contenedores de plástico y cartón.
Desbordamiento a pesar de que los empleados municipales de limpieza se han encargado de algunas de las zonas abandonadas, según informó Medina.
La decisión de acogerse a esta mejora, mientras se tramita el concurso público, es por la rapidez que aporta esta decisión y la prontitud que es necesaria en la limpieza de la ciudad, según añadió la concejala.
Medina advirtió de que el servicio de Clusa “ha funcionado durante años, pero este último ha fallado en su servicio”. La concejala, además del mal servicio, quizo justificar la suciedad de la ciudad debido al incremento de conciencia por parte de los ciudadanos de la necesidad de clasificar la basura a la hora de tirarla al contenedor. Según dijo la concejala, “ahora mismo en la ciudad recicla un 10% o 12% de las personas”.
