Un investigador australiano plantea en Canarias un programa de seguimiento a pacientes 'polimedicados'
Es un modelo que funciona con éxito en Canadá, Suiza y Australia
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 26 (EUROPA PRESS)
El investigador australiano Charlie Benrimoj presentó hoy a la consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Mercedes Roldós, la iniciativa 'ConSigue', un proyecto de seguimiento a pacientes 'polimedicados' que tiene como primer objetivo demostrar y evaluar el impacto de la intervención de las farmacias y, en una segunda fase, implantar este servicio que conlleva un ahorro para la administración.
El presidente del Colegio de Farmacéuticos de Las Palmas, Carlos Muñoz, su homólogo de Guipúzcoa, Miguel Ángel Gastelurrutia, y el profesor de la Universidad de Granada Fernando Martínez participaron en el mismo encuentro en la capital grancanaria, donde expusieron el documento a la consejera.
Argumentan que la mayor parte de la población que supera los 65 años toma más de cinco medicamentos y muchos hasta ocho o nueve, son los denominados pacientes polimedicados, y a más fármacos más posibilidades de interacción, equivocación en la administración y menos adhesión al tratamiento.
La intervención del farmacéutico en el seguimiento farmacoterapéutico de este colectivo ha demostrado que conlleva beneficios para su salud y ahorro para la administración, como sucede en Canadá, Estados Unidos, Suiza, Portugal, Reino Unido y, recientemente, Alemania.
REDUCCIÓN DE MEDICAMENTOS
Para emprender este estudio en Las Palmas ha sido necesario realizar fases pre-pilotos (Murcia y Granada) y piloto (Cádiz), de los que se desprende que la media de edad del paciente polimedicado, de los 139 estudiados, es de 75 años y toma una media de 9 fármacos.
Sin embargo, tras un mes de seguimiento bajaron los medicamentos prescritos porque el farmacéutico detecta interacciones y duplicidades que, puestas en conocimiento del médico, hacen que modifique la prescripción a un tratamiento más adecuado.
Además, le informa de los medicamentos que el paciente no se toma aunque se los recete, fenómeno que se suma al hecho de que cuando un paciente deja de tomar algún fármaco suele ser la importante, es decir, el del problema crónico, como la tensión, y no el que trata un dolor puntual.
El seguimiento conlleva un trabajo de concienciación con el paciente y una faceta de comunicación con el médico, que según los datos preliminares, acepta entre el 60 y el 70 de las sugerencias realizadas por el farmacéutico y se muestra agradecido, pues las farmacias realizan así una labor que le es imposible efectuar desde el centro de salud.
EL 50% DEL GASTO
De cada los 2.500 pacientes que puede atender una farmacia, entre 300 y 400 son polimedicados. Se trata de un colectivo que, a nivel general, copa entre el 40 y el 50 por ciento del gasto farmacéutico, que en total en Canarias asciende a unos 600 millones de euros al año.
La primera consecuencia de la implantación de este sistema es la mejora de la salud del paciente y el impacto económico, pero a los dos años, además, se detecta su incidencia en urgencias y los ingresos hospitalarios, pues ambos disminuyen, aseguró Benrimoj, quien agregó que las farmacias son el punto que puede recoger la información de las prescripciones que se realizan en los distintos niveles asistenciales.
La investigación se realizará a través de 35 farmacias que estudiarán a 10 pacientes cada una, 350 en total, durante seis meses, aunque para ello se necesita la implicación de la Consejería de Sanidad, cuya titular, Mercedes Roldós, mostró gran interés.
AHORRO
Como ejemplo del ahorro que supondrá para la administración, el experto australiano citó que si de cada diez medicamentos se desvela que dos no son necesarios, a un coste de 15 euros cada uno al mes, el ahorro anual, siempre con el beneficio para la salud como premisa, será de unos 360 euros por paciente y año.
“La cercanía del farmacéutico se debe aprovechar”, así como su preparación, aseguró el experto australiano, quien considera que el modelo de ordenación farmacéutica español es “perfecto” para prestar estos servicios a la población.
El proyecto, cuya fase de investigación tendrá un coste de unos 250.000 euros, se realizará también en Cádiz, Guipuzcua, Las Palmas, Castellón o Alicante y Zaragoza.
Cuenta con el apoyo del Ministerio de Sanidad, el Consejo de Colegios Farmacéuticos, integrados en el Foro de Atención Farmacéutica, promotora de la iniciativa, y de las Comunidades Autónomas en las que se desarrollará.