El presidente de El Hierro considera que la instalación del AFIS no es más que “un atropello” para la isla
VALVERDE (EL HIERRO), 22 (EUROPA PRESS)
El presidente del Cabildo de El Hierro, Tomás Padrón, ha querido dejar claro que la instalación del servicio de información de vuelo de aeródromo (AFIS) en el aeropuerto de Los Cangrejos no es más que un “atropello” para la isla, y ha dicho estar en “vísperas de un día triste, dado que a las 10.30 horas un interruptor desconectará del aeropuerto el sistema de control y subirá otro interruptor que asfixia”.
Tomás Padrón se manifestaba de esta forma con motivo de una concentración bajo el lema 'No al AFIS en El Hierro, por nuestro futuro' que se llevó a cabo esta mañana en el Salón de Plenos del Cabildo Insular, en la que también estuvieron presentes el presidente de la Asociación de Pequeños y Medianos Empresarios de El Hierro (Acevite), Herminio Sánchez, representantes institucionales, políticos, sindicales, empresariales y de la sociedad herreña.
El mandatario herreño ha recordado que en la década de los setenta, el aeropuerto de Los Cangrejos y la electrificación de la lista “lograron que ésta comenzara a dejar atrás la miseria y el abandono secular a la que estaba sometida”, por lo que ha asegurado que no va a permitir “dar un paso atrás”. “Si al final se consuma esta idea descabellada [instalación del AFIS], no nos vamos a quedar quietos; seguiremos trabajando juntos para lograr derogar esta Orden”, advirtió Padrón.
Entretanto, el presidente de Acevite ha anunciado que este sábado, 25 de septiembre, tendrá lugar a partir de las 17.00 horas una manifestación ciudadana en contra del sistema AFIS, el cual comenzará a funcionar oficialmente esta noche, a las 22.00 horas. La protesta irá desde la balaustrada a la plaza Virrey de Manila de Valverde.
Herminio Sánchez fue también el encargado de leer un manifiesto en el que se exige la derogación urgente de la Orden por la que se designa al aeropuerto de El Hierro como aeródromo AFIS; el apoyo del Gobierno de Canarias y su rechazo público a esta instalación; la necesidad de unas comunicaciones aéreas cómodas y seguras, así como frecuencias, itinerarios y tarifas que se adapten a las necesidades actuales y futuras, sociales y económicas de la isla.