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Los vecinos de uno de los pueblos más bonitos de España, dispuestos a encadenarse a los árboles para “salvarlo” de la turistificación

Los árboles en la calle Doctor Domingo Hernández Guerra, la principal del pueblo de Tejeda (Gran Canaria).

Iván Alejandro Hernández

Las Palmas de Gran Canaria —

Vecinos de Tejeda, municipio grancanario incluido en la asociación de los pueblos más bonitos de España, quieren evitar con todas las herramientas a su alcance las obras para hacer de la calle principal una zona comercial abierta a partir del 28 de mayo, como ha previsto el ayuntamiento. “Hay un grupo grande de gente que ya está dispuesta a encadenarse a los árboles el día que los vayan a quitar como última medida de presión social para salvar al municipio del turismo masivo”, asegura el presidente de la Asociación de Vecinos de Tejeda (Avete), creada por él junto a varias personas específicamente para luchar contra un proyecto que nace en 2015, cuando el actual grupo de gobierno, Agrupación de Electores por Tejeda (AET), ganó las elecciones con mayoría absoluta.

Con un presupuesto de 1.300.000 de euros, financiado íntegramente por el Cabildo de Gran Canaria, el proyecto de la zona comercial abierta de Tejeda contempla la reforma del mirador añadiendo zonas de descanso y la peatonalización de la calle principal, Doctor Domingo Hernández Guerra, donde los vehículos solo podrán circular en un solo sentido y en determinadas horas del día, priorizando “que la gente coma tranquila y pueda pasear”, explica María Eugenia Suárez, segunda teniente de alcalde de Tejeda. “Actualmente la calle no cumple los requisitos de accesibilidad y conviven muchas cosas al mismo tiempo. Y eso hace que haya un desorden. Se trata de reordenar las terrazas de sitio, liberar la zona de aceras y escaleras, retirar la barandilla y trasplantar los árboles a otro lugar”, resume la también concejala de Cultura, Festejos, Juventud y Servicios Sociales.

Esta última es la parte que ha generado más polémica entre los vecinos, que a través de sus demandas al consistorio y reivindicaciones en diferentes redes sociales -han recabado más de 5.000 firmas en change.org- lograron que el Ayuntamiento de Tejeda se comprometiese a trasplantar los árboles en lugar de talarlos, como está previsto en un principio. “El alcalde [Francisco Perera, de Agrupación de Electores] dice ahora que los árboles se van a trasplantar, consciente de que talarlos es una medida muy impopular. Pero eso son solo palabras, el documento lo que dice es que se va a talar, especifica con todo detalle cómo se van a talar los árboles”; además, rechazan también la retirada de la barandilla “de cantería labrada con madera noble”.

Desde el Consistorio, Suárez explica que es necesario quitar los árboles (laureles de indias) porque sus raíces afectan a las tuberías de algunos negocios de la zona, pero desde Avete rechazan este argumento porque han preguntado al Ayuntamiento sobre los daños que han ocasionado los árboles y dice que “no ha habido ni una sola denuncia”. La defensa de algunos vecinos de los 31 árboles que habitan en la calle principal obedece principalmente a motivos sentimentales: “Los árboles no molestan, dan sombra, embellecen al pueblo y están preciosos”, afirma Cruz.

Porque los vecinos no están en contra de la rehabilitación de la calle principal, como recogía el partido que ganó las elecciones con mayoría absoluta en su programa electoral, pero sí critican que se haya hecho de esta forma y de espaldas al pueblo de Tejeda: “Los vecinos hasta el mes de enero de este año no sabían absolutamente nada. Nosotros nos enteramos porque nos lo comentaron unos comerciantes que tuvieron una reunión en el Ayuntamiento en 2015 y nos dijeron que iban a quitar los árboles. Ahí estuvo el punto de partida para pedirle información al alcalde, que no nos la dio; entonces fuimos al Cabildo de Gran Canaria y solicitamos el proyecto, que nos lo entregó. Y fue en ese momento cuando nos enteramos de todo y empezamos a comunicarlo a la gente, crear la asociación, la recogida de firmas y demás”, relata Cruz.

La segunda teniente de alcalde defiende que en ningún momento el Ayuntamiento de Tejeda ha tenido la obligación de consultar a los vecinos para llevar a cabo el proyecto; en cambio, dicen que sí se les había recomendado, desde el plan director de la obra, preguntar a los empresarios de la zona y lo hicieron. Cuando los vecinos conocieron estas actuaciones y comenzaron a alzarse las primeras voces en contra, el Consistorio accedió a reunirse y, aunque les explicaron “todo el proyecto” con técnicos que detallaban porqué había que sustituir a los árboles, los vecinos que acudieron al encuentro rechazaron esos argumentos. Suárez cree que esta postura de rechazo se debe a que “en el fondo no quieren que Tejeda progrese ni prospere” y “piensan de forma egoísta”, pero “no podemos olvidar que sin el turismo, Tejeda estará abocado a morir”.

Sin embargo, desde Avete creen que lo que realmente busca el Ayuntamiento de Tejeda es “convertir esa zona en una gran plaza con muchas terrazas para que se llene de turistas”, cuando solamente hay “tres bares y una dulcería”. Por ello, Cruz considera que lo que el consistorio denomina zona comercial abierta es “una operación especulativa más que ahora llega a Tejeda, que es la punta de lanza de la cumbre grancanaria, y que luego se irá expandiendo por toda la zona”. El presidente de Avete cree que estas obras van a “hipotecar el futuro de sus habitantes” porque les van a prohibir circular a los residentes “como siempre lo hemos hecho para acceder a nuestros servicios básicos”.

A pesar de estas voces en contra, el Ayuntamiento ha confirmado que no volverá a reunirse con la asociación y que las obras comenzarán como está previsto aunque “algunas personas hayan manifestado que se van a encadenar a los árboles para impedir que los trasplanten”. A juicio de Suárez, para Tejeda estar en la asociación de pueblos más bonitos de España ha “supuesto un antes y un después en cuanto al desarrollo urbanístico y económico de la zona” y cuando llegan los turistas “se deben ofrecer los mejores servicios si se tiene la oportunidad de hacerlo”, pero sin caer en la masificación turística, “de la que nosotros rehuímos”.

Ante la negativa del consistorio, Avete ha acudido al Diputado del Común, que admitió a trámite la queja presentada por la asociación, y al Cabildo de Gran Canaria, donde fijaron una reunión para el próximo 31 de mayo, “que llegará tarde, pues probablemente las obras ya hayan comenzado” opina Cruz, y ya solo les queda “la presión social”, puesto que carece de los medios económicos para seguir contando “con el gabinete de asesores técnicos-jurídicos”.

Zona de aparcamientos

Zona de aparcamientosCuando el Ayuntamiento de Tejeda planteó la zona comercial abierta en 2015 se le exigía un número determinado de plazas para estacionar vehículos. Y con la financiación del Cabildo de Gran Canaria, se comenzó a construir una zona de aparcamientos “de tres plantas: dos subterráneas y una al aire libre” y que estará terminada “en poco menos de un mes”, asegura la segunda teniente de alcalde.

Cruz critica que en la parte de la superficie se haya habilitado incluso “para que quepan guaguas”, algo que contradice “las normas del plan general” porque la solicitud que hizo el Ayuntamiento de Tejeda “no contemplaba la inclusión de estos vehículos”; “además”, añade, “se decía que era a ras de suelo y tiene partes que se han elevado hasta dos metros”.

El próximo 25 de mayo Avete ha convocado “a todo ciudadano que esté a favor de la naturaleza y a cualquier causa en contra de su destrucción” a una concentración desde las 13.00 a las 14.30 horas frente al Cabildo de Gran Canaria, donde entregarán las firmas recogidas en contra de “la tala de los árboles de Tejeda”.

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