La portada de mañana
Acceder
El Gobierno da por imposible pactar la acogida de menores migrantes con el PP
Borrell: “Israel es dependiente de EEUU y otros, sin ellos no podría hacer lo que hace”
Opinión - Salvar el Mediterráneo y a sus gentes. Por Neus Tomàs

Emoción y entusiasmo entre las personas participantes en el proyecto ‘Conducción a ciegas’

Uno de los participantes en la actividad ‘Conducción a ciegas’

Canarias Ahora

Las Palmas de Gran Canaria —

La emoción y el entusiasmo han dominado el ambiente en la actividad Educación vial y conducción a ciegas organizada por la Fundación ONCE con el apoyo del Cabildo de Gran Canaria a través del proyecto Gran Canaria Accesible y en la que 40 personas con ceguera o discapacidad visual grave han experimentado las sensaciones de conducir.

La experiencia, pionera en Canarias, se ha celebrado coincidiendo con el día del sorteo especial del 11 del 11 de la ONCE en el Circuito Maspalomas con la colaboración de los profesionales de la autoescuela Carmelo, que con sus charlas e indicaciones lograron que el miedo y la inseguridad iniciales fueran dando paso a la euforia por vivir lo que muchos calificaron como una experiencia única que no dudarían en repetir.

“A la vista de sus reacciones y de la expresión en las caras al bajar de los coches, hemos logrado el objetivo de ofrecerles la oportunidad de realizar una actividad que en otras condiciones nunca podrían realizar”, resaltó la consejera de Política Social y Accesibilidad del Cabildo, Elena Máñez, que participó en el acto junto al presidente del Consejo Territorial de la ONCE, Miguel Ángel Déniz, y el delegado territorial de la ONCE en Canarias, José Antonio López.

Al finalizar la actividad, Miguel Ángel Déniz se mostró encantado con la “magnífica experiencia”, la forma más real de conducción que ha tenido nunca. “Poder manejar directamente el volante, comprobar cómo hay que coger las curvas, la sensación de velocidad, ha sido algo único”, añadió.

Han circulado en 5 coches manuales, cada uno de ellos con un profesional que les han acompañado de forma similar a una clase de conducción práctica de una autoescuela, con una charla teórica para quitarles el miedo, transmitirles seguridad y explicarles el funcionamiento del vehículo, y posteriormente comenzaron a circular de forma muy segura en un circuito de 4,5 kilómetros que en algunos tramos cuenta con casi 24 metros de ancho.

Por último, José Antonio López reconoció que no es nada sencillo mantener el control y la velocidad. “Siempre he viajado en coche como pasajero o copiloto pero llevar la máquina es algo completamente diferente que al fin he podido experimentar”, agregó.

Etiquetas
stats