Indemnización para tres represaliados de Franco
Tres personas represaliadas en Canarias durante el franquismo por su orientación sexual han sido indemnizadas por el Gobierno español, desde que en 2009 aprobara este reconocimiento económico a los que fueron encarcelados por ser homosexuales o transexuales.
Así lo anunció este jueves el Colectivo Gamá de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Gran Canaria, en un comunicado en el que informó de que asesora y ayuda en la Isla a solicitar indemnizaciones a quienes hubiesen sido objeto de encarcelamiento por su condición de homosexuales en aplicación de la Ley de Vagos y Maleantes o la Ley de Preligrosidad y Rehabilitación Social durante el Franquismo.
La asociación explicó que la condena por orientación sexual o identidad de género llevaba a estas personas no sólo a la cárcel, sino también al ostracismo, ya que les impedía conseguir trabajo, recibían el rechazo familiar y social y, en ocasiones, se exiliaban de sus pueblos o ciudades buscando el anonimato.
Desde que el Gobierno aprobara este reconocimiento económico, se han presentado cinco solicitudes de indemnización asesoradas por Gamá, que han implicado la búsqueda de documentos acreditativos de la decisión judicial del ingreso en prisión, así como la certificación acreditativa de los periodos de tiempo efectivos de permanencia en la cárcel, ya que en ninguno de los casos atendidos había constancia o documentación que acreditara haber estado privado de libertad o que el motivo de estarlo fuera ser homosexual.
Esta labor no siempre es fácil, ya que en algunos centros penitenciarios los archivos se han “extraviado” o han “desaparecido”, destacó Gamá.
A pesar de estos inconvenientes, de las cinco solicitudes presentadas con el asesoramiento del colectivo, tres han sido aprobadas y las otras dos todavía no han sido resueltas y el importe concedido varía en función del tiempo acreditado de permanencia en prisión.
Gamá subrayó que estas indemnizaciones están recogidas en la Ley de Presupuestos Generales del Estado de 2009 y agregó que, hoy por hoy, no hay tiempo límite de presentación de solicitudes aunque, pese a ello, el número de personas que las solicitan es muy reducido debido a que se trata de personas mayores o que desconocen su existencia y, en algunos casos, porque han rehecho su vida, actualmente están casados, con hijos, y no quieren que se conozcan estas experiencias.