Miles de personas piden a la virgen de Las Nieves un buen año de lluvias
Ramas traídas desde el pinar de Tamadaba, papas, huevos, un sol de justicia, la banda de Agaete, el cuatro de agosto y miles de personas dispuestas a pedirle un buen año de lluvias a nuestra señora de las Nieves son los ingredientes necesarios para cocinar la bajada de La Rama en Agaete.
Ninguno de ellos faltó en la jornada de este lunes en el municipio grancanario de Agaete para celebrar una de las fiestas tradicionales con más arraigo de Canarias.
Desde primera hora del mediodía de ayer domingo comenzaron a llegar hasta Agaete multitud de visitantes que barbacoa en ristre fueron ocupando los cientos de plazas de aparcamientos preparados para la ocasión en cualquier lugar donde cupiese un vehículo. Aprovechando, por qué no, tomarse un buen chapuzón en la playa de Las Nieves, pues el día invitaba a ello.
Una vez concluido el día, comenzaban los puestillos artesanales a funcionar, los braseros a calentar el carbón y el hielo a acompañar los cócteles más insospechados para dar la bienvenida al comienzo de la verbena, la música de los chiringuitos. Y, horas más tarde, el sol y la música de la banda de Agaete y Guayedra recorriendo las calles del casco del pueblo hasta llegar a la playa donde el remojón en el mar sirvió para cerrar una nueva edición de la bajada de La Rama de Agaete.