El Rey y la Infanta Leonor esperarán al martes para conocer a Sofía
La primogénita de los Príncipes de Asturias, la Infanta Leonor, conocerá este martes a su hermana recién nacida, informó un portavoz de la Casa del Rey.
Don Felipe y Doña Letizia han considerado más oportuno esperar hasta este martes para que Leonor, de 18 meses, acuda al hospital y así dar tiempo a la Princesa a encontrarse menos molesta del parto por cesárea que se le practicó este domingo.
En la rueda de prensa celebrada este domingo tras el nacimiento de su segunda hija, el Príncipe ya informó de que la Infanta Leonor acudiría a la clínica este lunes, o martes.
Poco después del mediodía de este lunes llegó Don Felipe al centro hospitalario y se creó una gran expectación entre los medios de comunicación al creer que podía ir la pequeña Leonor cuando el Príncipe abrió una de las puertas traseras del vehículo, donde se veía una silla para niños, para coger una bolsa.
También está previsto que el Rey acuda este martes por primera vez a la clínica para conocer a la Infanta Sofía, octavo de sus nietos.
Fuentes de la Casa del Rey indicaron que este lunes ya no hay previstas más visitas al hospital después de la que realizó la Reina este martes antes de viajar a Barcelona para celebrar el quinto cumpleaños de su nieto Miguel, hijo de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín.
Pila de Santo Domingo de Gumzmán
La pila de Santo Domingo de Guzmán, del siglo XII, joya del Románico reservada para príncipes e infantes, será donde se administre el bautismo a la Infanta Sofía.
La última vez que se utilizó esta histórica pila fue el 14 de enero de 2005, cuando fue acristianada la primogénita de don Felipe y doña Letizia, en una ceremonia celebrada en la intimidad en el Palacio de La Zarzuela.
También fue así cuando recibieron las aguas del bautismo su padre -que cuando acceda al trono lo hará como Felipe VI- en 1968, y sus tías, las Infantas Elena, en 1963, y Cristina, dos años después.
Fue precisamente en el bautizo de otro Felipe, en ese caso el IV y sucesor de Felipe III, cuando en el siglo XVII se utilizó por primera vez la pila de Santo Domingo para un bautismo Real.
Sin embargo, no sería hasta dos siglos más tarde cuando, por una orden de Isabel II, se destinaría exclusivamente para los bautizos de los descendientes directos de reyes o príncipes.
Los hijos de Alfonso XIII, y por tanto el Conde de Barcelona, padre de don Juan Carlos y bisabuelo de la recién nacida, fueron igualmente acristianados en tan singular reliquia, que en la actualidad se custodia en el monasterio de Santo Domingo el Real de Madrid.
Ni don Juan Carlos ni sus hermanas Pilar y Margarita, hijos del Conde de Barcelona, pudieron ser bautizados en ella. La Familia Real estaba en esos años en el exilio y las dos Españas de Antonio Machado se enfrentaban en una guerra.