Investigadas tres personas por la venta de productos falsificados en varios comercios de Lanzarote

Agentes de la Patrulla Fiscal y Fronteras (PAFIF) de Costa Teguise, en Lanzarote, ha investigado el 4 de abril a tres personas como presuntos autores de un delito contra la propiedad industrial tras una investigación realizada por la Guardia Civil en la que detectó delitos contra la venta de productos falsificados en distintos establecimientos comerciales de la localidad turística de Puerto del Carmen.

La investigación comenzó tras recibir varias denuncias de abogados representantes de varias marcas comerciales, que informaban de la venta de productos falsificados que causaban un perjuicio económico a las marcas que representaban, según ha informado la Guardia Civil en nota de prensa.

Esto llevó a la PAFIF de Costa Teguise a comenzar una investigación con el fin de conocer los establecimientos que realizaban la venta de los productos falsificados, pudiendo localizar tres bazares de ropa y complementos en la localidad de Puerto del Carmen, donde sus titulares realizaban ventas de productos presuntamente falsificados bajo marcas comerciales de alto valor.

Por este motivó se coordinó un dispositivo policial que permitió la realización de tres inspecciones simultáneas en los establecimientos relacionados, con la colaboración de un perito judicial de patentes y marcas, que verificó la calidad y grado de falsificación de los objetos intervenidos.

Esta actuación permitió la aprehensión de más de 1.100 productos falsificados entre los que se encontraban bolsos de marcas de lujo, camisetas y pantalones de equipos de fútbol. También intervinieron 166 chapas metálicas con el logo de marcas comerciales de lujo, que ocultaban en la zona del mostrador de pago para ser pegados en bolsos y pequeños artículos de marroquinería justo en el momento de compra, pudiendo de esa forma eludir los controles de calidad en caso de inspecciones de las autoridades correspondientes.

En cuanto al valor de mercado de la mercancía retirada asciende a más de 226.000 euros, cuantía que reclaman las marcas afectadas por los perjuicios causados y los beneficios dejados de obtener, quedando los investigados en unión de los objetos intervenidos a disposición judicial del correspondiente juzgado de guardia de Arrecife.