Los canarios llevan 17 años empobreciéndose

Turismo en el sur de Gran Canaria, la principal actividad económica de las islas

Román Delgado

Santa Cruz de Tenerife —

La Comunidad Autónoma de Canarias no ha dejado de empobrecerse en términos de renta per cápita (el PIB regional dividido entre los residentes en las islas) dentro de España en los últimos 17 años, en el periodo de análisis de 2000 a 2017.

Es lo que se refleja con meridiana claridad en los datos recientes aportados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) dentro de su trabajo Contabilidad Regional de España, estudio que permite analizar cómo ha evolucionado la renta per cápita en Canarias respecto al comportamiento medio español (base 100) en la etapa ya señalada. Se trata de unos años en que ha habido ritmos elevados de crecimiento económico y hondas recesiones, ambos fenómenos tanto con influencia en el país como en las islas.

Según las variables reseñadas del INE, Canarias lleva nada menos que 17 años (los últimos 17, de 2000 a 2017) perdiendo riqueza por habitante (solo se acercó algo en 2010, cuando pasó del 86,1% en 2009 al 86,5%) respecto al comportamiento promedio de España desde 2000 hasta anteayer; o sea, al cierre del ejercicio de 2017, que son los últimos registros oficiales disponibles.

En todo ese tiempo, la divergencia económica de las islas respecto al promedio nacional ha sido de escándalo, pues, como se aprecia en el gráfico que se acompaña, Canarias ha pasado de estar a algo más de tres puntos porcentuales de distancia en 2000 (96,71% del promedio español, este la base 100) a ahora situarse a una distancia de 19 puntos en 2017, con el 81,1% del límite nacional.

Las causas de la divergencia económica Canarias-España registrada en la variable renta per cápita son variadas y pueden ser hasta mixtas, desde la menor generación de riqueza en términos de PIB anual hasta el incremento de la población residente o, lo más probable, la combinación de ambos factores.

En términos absolutos y anuales calculados a precios de mercado, el residente en las islas ha pasado de disponer de una media de 20.703 euros al año (brutos) en 2000 a solo 19.862 en 2017, con una clara caída. En cambio, la tendencia media en España ha sido bien distinta: de 21.401 euros por habitante en 2000 a 24.479 en 2017.

La renta per cápita española ha crecido en esos 17 años, en términos nominales, por encima de los 3.000 euros por año y residente en el país, mientras que la del canario ha retrocedido algo menos de 1.000 euros en el mismo periodo de análisis y se ha alejado del promedio nacional por encima de los 4.000 euros por año y residente. Así están hoy las cosas...

La divergencia económica de Canarias respecto a España se ha consolidado, y además lo ha hecho con fuerza. Ah, y además se ha logrado tanto en periodos de bonanza como de decadencia o crisis. Estos últimos 17 años no han servido para que Canarias se parezca más España; en cambio, sí para ser más pobres dentro del nivel de riqueza promedio que impone el país.

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