Para tratar de desacreditar un informe independiente que levanta serias sospechas sobre la gestión del PP en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Cardona ha utilizado a los funcionarios como escudos humanos. Ha dicho que Saavedra los ha dejado en mal lugar al encargar fuera un informe que ha contradicho los que redactaron los técnicos municipales. Unos técnicos municipales, debemos recordar, que comparecieron ante la comisión de investigación del pelotazo del canódromo y explicaron lo que hicieron, cómo lo hicieron y por qué lo hicieron. Del mismo modo que en su día se explicaron los técnicos municipales que con sus informes dieron carta de naturaleza al pelotazo de La Favorita, que también se desembolsó en ese mismo año de 2002, el más rentable de la era soriana, al menos para unos determinados particulares. Cada día que pasa, cada nuevo folio que se incorpora al expediente, hacen que el caso canódromo huela peor. Seguimos sin entender por qué el equipo de Jerónimo Saavedra decidió en abril, al recibir este último demoledor informe, no airearlo en campaña electoral, porque por lo que tenemos entendido fue Nardy Barrios quien lo distribuyó al enterarse de su existencia. ¿Se imaginan que fuera al revés, que el PP de Soria tuviera un informe que delatara la corrompida política urbanística de Jerónimo Saavedra?