Parecía difícil superar la insoportable inconsistencia, la insipidez, la inocuidad, la ineficacia, la sandez, la nimiedad y el desinterés que despierta el Parlamento de Canarias. Pero este domingo, en un ataque de masoquismo, encontramos un remedo que lo supera con creces. Parece absolutamente natural que un programa de la Televisión Canaria destinado precisamente a contar y cantar las excelencias de la Cámara autonómica padezca los mismos problemas y se contagie de los mismos defectos. Su presentador, Ezequiel Borges, subdirector de Informativos de la casa y la cosa, entrevistaba este domingo al portavoz adjunto del PP, Manuel Fernández, que es también secretario general de ese partido en Canarias y hombre de unos escasísimos recursos dialécticos y políticos. De otros recursos más tangibles no tocaba hablar en esa entrevista, que fue para tararí y no echar gota.