Mientras se producen estos excesos en el entorno de las academias, que ya venían asfixiadas por la parálisis que el PP ha introducido en el Servicio Canario de Empleo, empieza a producirse en este organismo una frenética actividad. Nuestros enviados especiales nos cuentan cosas fabulosas acerca del frenesí que se aprecia en el registro, por donde entran toneladas y toneladas de papeles procedentes del Cabildo de Gran Canaria. Hemos indagado y al parecer se trata de los proyectos que la Corporación insular está enviando para cumplir con su promesa de dar trabajo a los afortunados ciudadanos empadronados en los municipios donde gobierna el PP. Ya nos enteraremos de la valoración que hace a este respecto el Consejo General de Empleo, si es que en una de éstas se anima Juliana García, con la venia de Águeda Montelongo.