Y no se crean ustedes que el expediente abierto es de los perretosos, esos de los de a tí te trinco. No. Estamos hablando, probablemente, de unos 6.000 euros al año en impuestos que se ha estado ahorrando la empresa de Reyes como consecuencia de no declarar los casi 5.000 metros de cableado de un vídeo comunitario que la firma explota en las urbanizaciones del Valle de Jinámar y Las Remudas. Calculen los amigos de las ciencias exactas, teniendo en cuenta que la Ordenanza Municipal número 26 obliga a ingresar 1,20 euros por metro lineal al año. El cableado ocupa fachadas y volados entre edificios y se ha extendido sin permiso de la Concejalía de Urbanismo.