Un informe caligráfico vincula casi un centenar de votos por correo de las elecciones de 2015 en Mogán: “Tienen el mismo origen”
Dos días antes de que la Fiscalía pidiese el archivo, por prescripción, del delito electoral de 2015 en la causa que investiga, entre otros, a la alcaldesa de Mogán, Onalia Bueno (Ciuca- Ciudadanos por el Cambio-), un informe remitido por el departamento de Grafística de la Guardia Civil al juzgado que instruye el procedimiento aportaba un nuevo indicio sobre la presunta trama de compra y tramitación fraudulenta de votos en esos comicios locales.
Ese informe pericial concluye que los formularios de tres remesas que suman 93 votos emitidos por correspondencia en oficinas ubicadas en Las Palmas de Gran Canaria y pertenecientes a vecinos empadronados en Mogán están vinculados, tienen “un mismo punto de origen”. Los especialistas del servicio de Criminalística analizaron siete de esos formularios para confirmar o desechar la hipótesis de la que partía el equipo de la policía judicial de la Guardia Civil de Puerto Rico, esto es, que la mayor parte de esos documentos habían sido rellenados por la misma persona con una “inusual y muy característica” letra.
Tras estudiar en detalle los rasgos gráficos identificativos de esa letra y el cotejo grafonómico, los peritos corroboran que una sola mano confeccionó la práctica totalidad de esos formularios y que otra cumplimentó el espacio destinado al código postal.
Cinco de esos formularios formaban parte de una remesa de 55 votos emitidos entre las 18.36 y las 19.23 horas del 16 de mayo de 2015 (ocho días antes de las elecciones) en la oficina de Correos en El Corte Inglés, en Las Palmas de Gran Canaria. El equipo judicial que investiga la presunta trama de compra de votos en Mogán ya había advertido en un informe remitido en septiembre de 2020, días antes de la detención de la alcaldesa y de otros dos concejales y de la entrada y registro a las dependencias municipales y a la sede de Ciuca, de que en esos formularios figuraban escrituras “visiblemente idénticas” y de que habían sido cumplimentados de una manera “muy disciplinada” y precisa, haciendo constar tanto el número de distrito, como la sección y letra de la mesa electoral.
Esa letra coincidía, además, con otros formularios intervenidos en una remesa con 31 votos entregada entre las 9.13 y las 10.13 horas del 19 de mayo en la oficina situada en la calle Granadera Canaria de la capital y con otra con 7 votos emitida unas horas antes, entre las 20.19 y las 20.26 del día 18, en la calle Secretario Padilla, en el mismo municipio.
Este informe, unido al conjunto de datos y actuaciones practicadas durante la investigación, refuerzan la idea del equipo judicial de la Guardia Civil de que al menos seis remesas intervenidas contenían votos “captados y tramitados de forma ilícita” por la organización.
Los investigadores explicaron la mecánica del voto por correspondencia en informes anteriores. Según sus pesquisas, el partido político Ciuca reclutó a un grupo de vecinos del municipio para que actuaran como “captadores” de electores en situación de vulnerabilidad. A partir del testimonio o de grabaciones de colaboradores arrepentidos o molestos con la organización y de personas que habían confesado haber dado su voto a esta formación a cambio de una cantidad de dinero, la Guardia Civil determinó que dos eran las modalidades a través de las que se compraban voluntades: por correo y directa o a pie de urna.
En el caso del voto por correo, y siempre según los informes del equipo de la policía judicial, los captadores llevaban a los electores a la sede de Ciuca para cumplimentar los formularios de solicitud, para que les enviaran las papeletas a sus domicilios. Algunos esperaban en la sede y otros entregaban el DNI para que se los fotocopiaran y volvían más tarde. Los vecinos debían entregar esos formularios en las oficinas de Correos personalmente y esperar a que le llegara el sobre con las papeletas a sus viviendas. Tras recibir esta documentación, era “condición inexcusable”, según alguno de los testigos, que no abrieran los sobres y que los entregaran a algún miembro de la organización. Es en este momento cuando, según los investigadores, los propios componentes de la trama rellenan otro formulario, esta vez de emisión de voto, y lo depositan en una oficina de Correos. Para este último trámite no es necesaria la presencia del elector, puede hacerlo un tercero sin necesidad de autorización.
El informe caligráfico del servicio de Criminalística revela que este último paso partió, en el caso de esas remesas, de un único punto, lo que centra las sospechas en la sede de Ciuca.
Incremento del voto por correo
La modalidad de voto por correo se incrementó en un 292% en Mogán en las elecciones de 2015. En esos comicios se contabilizaron 558 por esta vía frente a los 191 de 2011. En 2019 la cifra casi se triplicaría, hasta los 1.494 sufragios. Con respecto a los de 2015, al equipo de la policía judicial le llamó la atención el hecho de que, a pesar de que un gran grupo de ciudadanos realizó la solicitud en sucursales de Mogán para que las papeletas fueran entregadas en sus domicilios en el municipio, tras recibir el sobre, lo entregaron en otras localidades, principalmente en la capital grancanaria, ubicada a 70 kilómetros.
La hipótesis de los investigadores es que los propios miembros de la organización eran los encargados de presentar remesas simultáneas en sucursales alejadas del municipio con la finalidad de evitar que fuesen reconocidos por empleados o vecinos de Mogán.
Ciuca obtuvo diez concejales en las elecciones de 2015. Se quedo a uno de la mayoría absoluta. En una cita en la que podían participar algo más de 10.000 ciudadanos empadronados en el municipio, sacó 400 votos más que la segunda fuerza política del PP, que perdió su mayoría y se tuvo que conformar con ocho concejales. Nueva Canarias obtuvo un edil con 339 votos. En una de las grabaciones que obran en la causa, José Monzón, colaborador de Ciuca en esa campaña, le reconoce al exalcalde de Mogán Francisco González (PP) que solo con el voto por correo obtuvieron “382 o 383” apoyos en esos comicios, a los que habría que sumar la supuesta compra de voluntades a pie de urna.
1