Los zifios son una familia de cetáceos que viven lejos de la costa y en aguas muy profundas. No es habitual que aparezca algún ejemplar varado en las costas gallegas: desde 1990 aparecieron 35. De media, uno cada año. Pero en los poco más de dos meses desde que comenzó 2023 ya son cinco los contabilizados, explica la Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños (Cemma). El último de ellos, localizado el pasado sábado, 4 de marzo, en la playa de As Amorosas, en la ciudad de A Coruña, murió a causa de los plásticos que había ingerido.
El análisis que se hizo del cadáver mostró que era una hembra adulta de zifio común (Ziphius cavirostris) que medía 6,29 metros. Tenía un fuerte golpe que hace pensar a los expertos que pudo haber varado en algún lugar que se desconoce, ya que nadie vio al animal vivo. Tenía parásitos y algunas patologías crónicas “poco relevantes”. Fue el análisis del sistema digestivo lo que mostró la causa directa de la muerte: el animal había ingerido basura marina, en concreto, plásticos. Le provocaron una obstrucción en el estómago y en el intestino que le causó un fallo orgánico en cascada.
La Cemma considera que el varamiento de este zifio es “un símbolo” ante el que pide no cerrar los ojos. El animal, dice, ha devuelto a tierra los que es “exclusivamente” del ser humano: los plásticos. El cetáceo fue localizado flotando en la costa hace unos días y la marea lo llevó a la arena, de donde lo sacaron los equipos de la Policía Local, la Cruz Roja y la Autoridad Portuaria. Fue depositado en el puerto de Oza hasta que el pasado lunes le hicieron la necropsia el responsable de la Rede de Varamentos de Galicia, Xabier Pin; la veterinaria del Instituto Universitario de Sanidad Animal y Seguridad Alimentaria de Canarias (IUSA) Raquel Puig; la veterinaria de la Facultad de Lugo Ana Saldaña y Alfredo López, integrante de Cemma e investigador de la Universidad de Aveiro.
Los cuatro zifios que llegaron a las costas gallegas antes que este estaban ya muy descompuestos y conocer la causa de la muerte se hizo complicado. Aparecienron entre la ría de Muros y Noia y la de O Vicedo. Cemma indica que la aparición de varamientos masivos de zifios está relacionada con alteraciones acústicas de su medio como las causadas por maniobras militares o prospecciones submarinas. Esto puede afectar a los animales sin matarlos, pero les provoca una “ceguera” que puede llevar a que pierdan la capacidad de detalle a grandes profundidades cuando buscan alimento y confundan objetos como bolsas y cabos con cefalópodos que están nadando.