En el último capítulo de la tercera temporada de 'Sin tetas no hay paraíso' titulado 'Expiación' los planes de Catalina para fingir su propia muerte no resultan eficaces. Dispuesta a todo para evitar que 'Bebe' Mejía se entere de que ha sido víctima de una trampa, la joven emprende una arriesgada maniobra que deja fuera de juego al secuaz del mexicano.
Cata comienza entonces una frenética maniobra para avisar a Jessica del peligro que corre por haberla ayudado, una carrera en la que Martín la Roca y sus hombres tratan de protegerla con todos los medios a su alcance, sin saber que su destino ya está escrito.
Llevado por la desesperación, Mejía trata de limpiar el nombre de su hermana Daniela, asesinada por Catalina hace unos capítulos. Tras escaparse de la cárcel, donde es conducido acusado de un doble asesinato, el de Sandra y “el Moreno”, Mejía emprende su vengaza y consigue atrapar a Catalina, que sólo piensa en salvar la piel de Jessi.
En la azotea de un hotel Mejía dispara las balas que darán con Catalina en el suelo, herida de muerte. Así se escribe el final de la tercera temporada de esta popular serie, que ya tiene firmada su continuidad, aunque deja huérfana de personajes la trama emprendida. Con una muerte, así se despide de la audiencia como ya hiciera al final de la anterior temporada, cuando Miguel Ángel Silvestre decía adiós a la serie que le llevó a la fama. Cata, su siempre amada, se reencontraba ayer con “El Duque” en el paraíso, donde ya nadie les podrá separar.