Hablan los hipsters que celebraron la victoria del PP en Génova: “Fuimos muy bien recibidos”

Llegaron la noche del 20D con sus bigotes, sus barbas, sus carteles y su actitud irónica para plantarse frente a la sede del PP en la calle Génova. Allí esperaron a que el presidente del Partido Popular apareciera como vencedor de las elecciones generales para jalearle con sus pancartas de “Menos podemos y más torreznos” y “Hipsters con Rajoy”, mientras su imagen servía para ilustrar noticias en los periódicos digitales de todo el mundo y entradillas de noticiarios de televisión.

Podría parecer que estos dos individuos estaban sacados del anuncio de la campaña viral del PP, pero son de carne y hueso y pertenecen al colectivo ultrarracionalista Homo Velamine, conocido por sus acciones paródicas. El periódico Somos Malasaña se ha puesto en contacto con ellos para que cuenten los motivos y la experiencia de su performance (lee hasta el final para conocer algo más sobre su movimiento). Esto es lo que han respondido:

─Somos Malasaña: ¿Qué objetivos perseguíais con la acción?

─Homo Velamine: Poner en valor los valores intrínsecos del Partido. Por eso elegimos el eslógan “Menos Podemos y más torreznos”, que creemos que sintetiza bien el programa político del PP. Aunque es inevitable que, como hipsters, seamos críticos con algunos de sus aspectos, especialmente en los que el Partido se muestra más tibio, como el papel de la monarquía o la necesaria reivindicación de los valores del mundo antiguo.

─¿Por qué ir como hipsters? ¿Influyó la campaña viral del PP que los tenía como protagonistas?

─¡Porque somos hipsters! Esta es nuestra indumentaria usual, y no es raro encontrarnos cualquier día por Malasaña. Por supuesto, la campaña del PP nos dió voz, y fue importante para visualizar a los hipsters que apoyamos al PP. ¡No todos los hipsters somos tan frívolos como la gente piensa!

─¿Cómo os recibieron en el lugar los simpatizantes habituales del PP?

─Fuimos muy bien recibidos, claro. Gustó mucho que los jóvenes más modernos por fin reivindicaran su apoyo al PP. Estuvimos hablando con varias personas de cómo el Partido sólo parece dirigirse a los ancianos, y creemos que es positivo que Rajoy juegue al dominó con los ancianos y haga entrevistas con Bertín Osborne y María Teresa Campos, personajes que los ultrarracionalistas admiramos.

Pero coincidimos con las personas que hablamos que el Partido tendría que intentar llegar también a los jóvenes que defendemos el mundo clásico, y los hipsters somos los más claros exponentes de la unión entre lo nuevo y lo antiguo. El ‘spot’ del PP es un primer paso en esta dirección, pero esperamos que no se quede ahí, y en la próxima campaña Rajoy también conceda entrevistas a Vice o DisparaMag.

─¿Os ha sorprendido veros hoy en las fotos de los periódicos?

─Sí, no esperábamos tanta repercusión, la verdad. Había mucha más gente con historias interesantes que podrían haber cosechado buenos titulares, como un indio “pepero” y católico, amante de los torreznos, el Ribera del Duero y las gambas al ajillo, que es dueño del restaurante indio Benarés (c/Zurbano, 5); o el joven que se quejaba por no poder votar al PP a causa de un retraso mental entre cánticos de “Arriba España” y “Viva Franco”. Eran historias muy buenas, aunque supongo que la nuestra era la más visual y por eso ha tenido más repercusión.

─¿Votasteis por el PP, por el cambio o no acudisteis a las urnas?

─Por supuesto que ejercimos el derecho a voto. Preferimos guardar en secreto nuestra elección, pero baste como muestra el apoyo explícito en Génova. Eso sí, no hemos votado al PSOE, aunque por supuesto hemos tenido en cuenta que Napoleon Dynamite pida el voto para Pedro Sánchez.

─¿Qué pensáis sobre la cultura de lo hipster que ha inundado Malasaña? ¿Creéis que durará o será solo una moda pasajera?

─No creemos que vaya a desaparecer: más bien al contrario, es muy probable que inunde otras esferas de la sociedad, y por tanto otras zonas de la ciudad. El famoso ‘spot’ del PP creo que va a ser decisivo para la aceptación y la difusión del movimiento hipster, y no ha de extrañarnos ver dentro de poco en el barrio Salamanca a jóvenes barbudos con enormes gafas de pasta. Así acaban las mejores corrientes artísticas, al fin y al cabo: absorbidas por el grueso de la sociedad. ¡Señal de éxito!

─¿Es hipster el ultrarracionalismo?

─El ultrarracionalismo no es forzosamente hipster pero, como vimos ayer, sí que hay hipsters ultrarracionalistas. El hipster es ultrarracionalista en tanto que proclama una promiscuidad incesante entre lo nuevo y lo viejo, entre lo más elevado y lo absolutamente grosero y zafio. En la barba yihadista o ermitaña, lavada con acondicionador de última generación producido por nuestra mejor ciencia actual, está ya implícito el concepto de hipsterismo ultrarracional y la necesidad de su existencia.

Este es el vídeo que ellos mismos grabaron de su última acción: