El candidato de IU a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, ha denunciado que “el único milagro” que hizo el exvicepresidente económico del Gobierno Rodrigo Rato fue “no haber entrado en la cárcel a antes por la cantidad de fechorías en las que se está demostrando que ha participado”.
“Estamos viendo las cloacas de lo que fue el milagro económico del PP, es decir, redes de corrupción clientelares como Gürtel, Bárcenas, el Caso Nòos o el de Rato”, ha lamentado el diputado de IU en declaraciones a los medios tras la Junta de Portavoces del Congreso, al ser preguntado sobre la detención del empresario Alberto Portuondo Coll, presunto colaborador en el blanqueo de Rato.
Por ello, Garzón ha manifestado que espera que la Justicia sea “muy rápida para que se esclarezca todo lo que está sucediendo” y se determinen las responsabilidades penales, aunque ha avisado asimismo que “está claro” que también hay “una responsabilidad política”, ya que se trata de “un personaje público tan notable como es Rato, que tiene un trato de favor tan destacado por parte de este Gobierno, con el caso de la visita al Ministerio del Interior”.
“Creo que eso lo único que hace es perjudicar la imagen de la política en España, cuando un Gobierno trata de forma preferencial a un presunto delincuente y a una persona que tiene tanta sombra de corrupción encima como es Rodrigo Rato”, ha ahondado.
“USO PARTIDISTA” DEL TRIBUNAL DE CUENTAS
Garzón también ha defendido la necesidad de acabar con las redes clientelares que a su parecer existen en otras instituciones como el Tribunal de Cuentas, que “se ha visto salpicado por numerosos escándalos vinculados” a dichas redes clientelares.
“Es evidente para toda a ciudadanía que hay un desprestigio generalizado de las instituciones democráticas”, ha lamentado al ser preguntado por la reunión que mantuvo la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, con seis de los siete consejeros propuestos por su partido para este órgano, según informa el diario El País.
“Hay que recordar que el Tribunal de Cuentas no es efectivo ni eficaz a la hora de fiscalizar la Administración Pública. Mientras eso no esté funcionando y mientras las redes clientelares estén vigentes en esas instituciones no habrá una democracia real en nuestro país y seguirán siendo utilizadas de forma partidista por los diferentes Gobiernos”, ha denunciado, para reclamar la necesidad de poner en marcha un proceso constituyente de “revisión total de la Constitución”.