El vicepresidente del Gobierno y consejero de Economía y Hacienda, José Manuel Soria, se presentó este jueves absolutamente compungido ante la opinión pública canaria para anunciar que le va a doler en lo más íntimo tener que pagar al empresario Rafael Bittini los 102 millones del pelotazo de Tebeto. Quizás para irse preparando para trance tan traumático, el vicepresidente compartió con el abnegado empresario mesa y mantel en una de las marisquerías más prestigiosas de Madrid, El Telégrafo, en la muy céntrica calle del Padre Damián. Ocurrió el viernes día 4, después de una agotadora jornada que incluyó para Soria su asistencia al comité directivo nacional de su partido. Algún compañero de siglas presente en el restaurante aún se anda preguntando por los motivos de esa cena. Y nosotros damos por hecho que la pagó Bittini, que en estos momentos es persona mucho más acaudalada que nuestro afligido consejero de Hacienda.