El compromiso portuario y la credibilidad de sus políticos

Desde que la Historia se configuró a través de la escritura, los puertos comerciales han sido pasos fronterizos de mafias organizadas; sobornos, mercancías ilegales, polizontes, esclavos, inmigración clandestina y drogas para su venta y consumo. También, la presencia del cambullón como elemento de trueque con los propios capitanes de barcos, marineros y trabajadores de los muelles. Con el transcurso de los años, todas estas actividades ilegales han ido decayendo, controlada por la Justicia de los respectivos países del mundo. No obstante, y pese a la estrecha vigilancia aduanera, todavía siguen las actividades mafiosas en las comunicaciones marítimas, especialmente en el contrabando de las drogas. Todo ello viene a cuento por la importancia que tiene un escáner en el puerto de Santa Cruz de Tenerife.

Mientras tanto, las reacciones de los políticos de Canarias y presidente del Colegio Oficial de Agentes y Comisionistas de Aduanas de Santa Cruz de Tenerife, muestran su descontento y preocupación ante la decisión de Solbes. Pero de nada valen las quejas si no gozamos de simpatía y credibilidad ante el poder central de Madrid. Seguimos siendo mirados como el último rincón del mundo; no damos la talla ante los políticos españoles, los cuales no son nada del otro mundo, pero son españoles, con antecedentes y lazos de aquellos conquistadores asesinos que en otra época exterminaron a los guanches de nuestro Archipiélago canario. No hemos tenido casi nunca un gobierno regional representativo, fuerte, consolidado, seguro y respetado por parte de los mandatarios del gobierno central de Madrid.

De que me vale que el senador del PP por Tenerife, Antonio Alarcó, diga que “es una desfachatez, una falta de respeto y una desconsideración hacia Canarias y, concretamente, hacia Tenerife”. De que me vale que diga el senador de Coalición Canaria en el Senado, Alfredo Belda, que “es una tomadura de pelo la respuesta dada por el vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía, Solbes”. De que me vale que el presidente del Colegio Oficial de Agentes y Comisionistas de Aduanas de Santa Cruz de Tenerife, Mario Ramos, diga que “el puerto de queda desfasado y no compite”. No, no es momento de quejarse. Es momento de entrar en acción. De defender lo nuestro con inteligencia y valentía. Tenemos que demostrar a los políticos de Madrid que somos capaces de hacer cosas importantes por nuestra tierra y que tenemos personalidad y credibilidad ante los restos políticos, sociales y económicos del Archipiélago canario.

Rafael Lutzardo