¡Fuerte calor!

Encima en el sur la cosa estaba peor. Por eso Paco se vino para la capital. Sí, Paco González, hombre, el alcalde de Mogán. Yo pensé que con el aire acondicionado del hotel se le iba a enfriar la cabeza. Pero que va, el hombre se puso peor. Y pegó a hablar, hablar, hablar, y se puso a decir lo que pensaba, o lo que quiere que pensemos que él piensa. El hombre cree que hay una gran conspiración contra él. La policía está invadiendo su vida íntima. Lo está tratando como si fuera un traficante?de drogas. Porque el alcalde moganero cree que sólo se le pincha el teléfono a los que trafican con drogas. La teoría de Paco González es que se puede traficar con influencias, que eso pasa en todos los pueblos. Yo te consigo trabajo y tú me votas. Yo le echo una mano a un empresario amigo, que coloca a los que me votan. Y “lo tenemos todo pactao, Onalia hace el trabajo sucio”. Por eso si Onalia espía a los policías nacionales “sus razones tendrá ”. Ah, ¿pero eso no es legal?¿Eso no es íntimo?

Fíjate lo que hace el calor, chacho, que para denunciar una conspiración realizada por la policía y apoyada por los medios de comunicación lo que hace Paco González es venir a la ciudad donde la Policía organiza las conspiraciones y convoca a los medios conspiradores. A eso lo llamo yo sacar pecho. Es como si te dieras cuenta que te están chupando la sangre y buscas refugio en la casa del Conde Drácula, más o menos es lo que hizo Paco González ayer.

En Madrid también hacía un montón de calor. No hizo falta que me lo dijera Federico Utrera, me di cuenta cuando escuché a Ana Oramas en el Congreso de los Diputados. La portavoz del dúo de CC dijo: “voy a ser peligrosamente sincera, porque eso que podría parecer bueno sería una tragedia, que nuestra fortaleza sea a costa de la postergación de nuestra tierra. Malo sería que como consecuencia de la exclusión y el abandono de nuestro pueblo nosotros estuviéramos aquí más representados o peor si llegara el día en que no estuviese ningún canario dentro de estas cuatro paredes”. Que esta mujer criada políticamente en la UCD y transformada poquito después en defensora de la “hora de Tenerife” acabe lanzando un mensaje que podría tener una lectura independentista, a pesar de que su partido comparte gobierno con el españolísimo Partido Popular, no me digan que esto no es una prueba de que el calor hace estragos también en Madrid.

Paco González y Ana Oramas coinciden en que el gobierno de España está siendo malo malísimo con Canarias. El alcalde cree que el ejecutivo español y su policía son malos sólo con él y con los concejales del PP, mientras que Ana Oramas considera que la maldad del gobierno español es contra todo el pueblo canario. José Bono y el dueño del hotel donde dio la rueda de prensa el alcalde de Mogán tienen la obligación de tomar la misma medida: deberían llamar al personal de mantenimiento para que arregle el aire acondicionado del hotel y del Congreso de los Diputados, porque quiero pensar que ni Paco González ni Ana Oramas hubieran dicho lo que dijeron ayer sino llegan a estar afectados por el viento y las altas temperaturas. Lo dicho, alerta naranja y ¡fuerte calor, oye!

Juan García Luján