Ha llovido una barbaridad desde aquel eslogan de “No pesa nada, es mi hermano”, pero las necesidades materiales de la Ciudad San Juan de Dios, en El Lasso, Las Palmas, siguen siendo muchas. Prestan allí un servicio impagable a numerosas personas y es necesario echar una mano. Así que con la excusa de ir a visitar su Belén y su colección de Papanoeles, puede darse un salto cualquier día de éstos, de lunes a domingo, entre las 10.30 y las 13.00, y entre las 16.30 y las 19.30. Hay una tienda-rastrillo en la que poder adquirir alguna chuchería y dejar una ayuda económica, que siempre es bien recibida. Estará abierto hasta el 6 de enero.