Seguramente debió abstenerse de formar parte de esa comisión José María Maya, director de las obras de la Circunvalación, porque al final resultó que tres de las cuatro esculturas encargadas son obra de autores vinculados a la galería de Saro León, esposa de Maya. Miquel Navarro, autor de la escultura de la glorieta de Escaleritas, ha expuesto para la galerista en Las Palmas de Gran Canaria; Gregorio González, cuya obra fue contratada para el enlace de Tamaraceite, ha expuesto al menos once veces para Saro León (París, Oporto, Madrid, La Coruña, Las Palmas y Turín), y Manolo González, que hizo la escultura del enlace de La Ballena, ha expuesto para Saro León en Madrid y en Las Palmas. Nadie habla de ilegalidades ni de pelotazos, pero puestos a encontrarle las cosquillas a María Porto, bien harían los puristas en reinventar artísticamente la Circunvalación entera, que fue, como dijo Ansar, colosal. Y del mundo mundial.