Desgraciadamente hay primicias que tenemos que ceder a nuestros entrañables colegas de otros medios de comunicación. Y no porque no queramos estar atentos ni nos lo propongamos, sino porque nos es imposible acceder a los protagonistas de algunas de esas noticias. Es el caso del PP, cuyos miembros ejecutan marcialmente la prohibición de la superioridad de concedernos entrevistas. Así que tenemos que seguirlos en otros medios. Carlos Sánchez, flamante nuevo portavoz del PP en el Cabildo de Gran Canaria, concedió este miércoles su primera entrevista a la Cadena Ser, y en ella quedó retratado como un político “profesional” que en sus ratos libres ejerce de empresario y/o gestor de las empresas de la familia. Pues bueno, vale. Además, Sánchez se declaró cachiporro en el uso del botón rojo y el botón verde de las grabadoras, lo que no resultó un obstáculo para grabar aquella conversación con el denunciante del caso del Grupo Europa, Francisco Benítez Cambreleng. Confiesa ser el autor de la grabación y asegura que volvería a hacerlo. Vean por qué.