Ya habrán visto por ahí cómo se está poniendo de internacional la clase empresarial grancanaria, que acude con destacados representantes a cenas de gala en el Palacio Real de Madrid. Ocurrió este martes con motivo de una recepción al presidente de Mauritania, un país que acaba de salir triunfante de un intento de golpe de Estado. Además del presidente de Inforcasa, Juan Francisco García, y de Freiremar, Manuel Freire, estaba presente el director general de Relaciones con África, Luis Padilla, la única representación del Gobierno de Canarias. No es por minusvalorar al director general, pero quizá un acto de ese calibre bien merecía alguna presencia más.