Buen portero Carnevali, sí señor. Y buena gente. Se merece mucha suerte en esta vida. Pero quizá haya de hacer un esfuerzo para ganársela y evitarnos a los aficionados a la UD Las Palmas algunos disgustos. Si asume las tareas que ha de asumir, estaría bien que no nos volvieran a pasar cosas como las de este fin de semana en que dos jugadores, con su parte de culpa incluida, se quedan en tierra porque el responsable de la expedición se mete en el avión y no hace las oportunas comprobaciones. Si es el encargado, decimos, que se encargue. Porque también es el encargado de que no nos metan tranques por alineaciones indebidas y ya llevamos dos en lo que va de temporada. Le animamos con mucho cariño, que vienen partidos determinantes y los despistes se pagan caros. Gracias Daniel.