El suelo de Meloneras donde se pretende un Corte Inglés no está clasificado, una tarea que corresponde al Ayuntamiento. Si éste no lo hace, no cabe continuar tramitando la obtención de la licencia comercial específica. En San Fernando sucede exactamete lo mismo, es más, la palabra previa la tiene el municipio, y la definitiva, el Gobierno de Canarias aplicando la Ley de Comercio. Pero si, pongamos por caso, Bruselas considerara que toda esa legislación comercial canaria restrictiva de la actividad es incorrecta conforme a las directrices comunitarias, sería el planeamiento urbanístico el que tendría la primera y la última palabra. Por eso el Ayuntamiento de San Bartolomé espera que, al ser incompatible con la Ley de Comercio, el convenio urbanístico firmado con Lopesan decaiga, no se clasifique el suelo en Meloneras y alternativamente se clasifique suelo en San Fernando para acoger una pieza urbanizable comercial.