Se sumó este miércoles a la ceremonia de la confusión de los concursos negociados sin publicidad el rey del purismo administrativo, el consejero de Nueva Canarias Carmelo Ramírez, que no mueve ni un euro del dinero público sin hacer un concurso público, convocar una asamblea y hacer una rogativa. El trámite de subvenciones a Cuba, Frente Polisario o Vecindario está exento de la pulcritud, por supuesto, lo que comprendemos dada la honradez que siempre ha presidido sus actuaciones. Será largo el listado de concursos por este procedimiento realizados desde el Cabildo, tanto ahora como cuando Ramírez gobernaba con el PP y era más laxo, pero hoy nos detendremos en los que tiene en estos momentos en trámite la consejera de Turismo, Rita Martín, obligada por su José Manuel a poner el grito en el cielo por una adjudicación perfectamente legal promovida por el gerente del Consorcio para la Rehabilitación Turística del Sur de Gran Canaria, José Fernández. Les proponemos que consulten la web del Gobierno, división Promotur, y cuenten hasta que se aburran la cantidad de negociados sin publicidad que tiene la doña.