Otra de arena. De la Audiencia Provincial de Las Palmas acaba de salir calentita otra sentencia que no ha sorprendido tanto como la anterior. La sentencia, condenatoria, ha recaído en el charlatán de feria que compra cada día todos los números del sorteo para que le caiga un puro de considerables dimensiones. Se llama Carmelo Martín y dirige con rumbo al marisco una emisora que colecciona sentencias y resoluciones de todo tipo, la inmensa mayoría de ellas aconsejándole vivamente que se dedique a la cría del chuchango u otras actividades que le alejen del peligro cierto de entrar en prisión que se cierne sobre él. A este impresentable charlatán le acaban de condenar a 6.000 euros de indemnización más intereses, una multa de seis euros al día durante veinte días, al pago de las costas judiciales y a leer la sentencia en la emisora donde cada día eructa sus insultos, amenazas, insidias y mentiras este calumniador profesional.