Sí, hay que felicitar al PP en el Cabildo de Gran Canaria por sumarse a la larga lucha de la Asociación por la Memoria Histórica de Arucas y destinar 94.000 euros a las primeras labores de desescombro del pozo de Tenoya. Y hay que felicitar a Larry Álvarez, coordinador de Cultura de la Corporación, por haberse tomado en serio la moción aprobada unánimemente por la Corporación. Ese mérito, sin embargo, quedó empañado este lunes por el empeño por capitalizarlo todo y desplazar al alcalde que más se ha comprometido con la causa. Ángel Víctor Torres se puso del lado de la Asociación para la Memoria Histórica desde su creación, en 2003. En aquel momento pidió ayuda económica al presidente del Cabildo, a la sazón José Manuel Soria, para actuar sobre el pozo de Tenoya. La respuesta de Soria fue la que ustedes se imaginan: no hay dinero para esas zarandajas. Los pasos del alcalde se dirigieron entonces hacia la Mancomunidad del Norte, a cuyo frente se encontraba entonces un ex socialista reconvertido al PP, Luis Hipólito Hernández, que también denegó la ayuda. Quedaba el Gobierno de Canarias, entonces presidido por Adán Martín, que no contestó a las peticiones hasta 2005, cuando ya había expulsado al PP del Ejecutivo. Fue una iniciativa parlamentaria de otro socialista, Blas Trujillo, la que condujo a que se consignaran en los presupuestos de 2006 300.000 euros que se destinaron a rescatar del olvido a los asesinados del pozo de Las Brujas. Esa cantidad alcanzó malamente para los trabajos y para la identificación por ADN de los restos, de ahí que nadie de por suficientes los 94.000 euros concedidos ahora por el Cabildo. Son solamente 1.000 euros menos que el mismo Cabildo ha gastado oficialmente en su campaña insularista “Por Gran Canaria. Sí Podemos”, lanzada un significativo 18 de julio.