Estamos por confirmar el destino que darán al despacho que en la sede de Presidencia en Las Palmas ocupaba hasta estos días Miguel Guerra García de Celis, uno de los sociólogos responsables del Sociobarómetro de Canarias. El funcionario se encontraba disfrutando de unos días de asuntos propios cuando se produjo la decisión de las alturas, lo que sin embargo no fue impedimento para que desalojaran sus pertenencias de esas dependencias de modo expeditivo. Tal desalojo no debe entenderse, sin embargo, como una renuncia expresa del nuevo equipo gubernamental a la consulta sociológica que lleva ya dos oleadas de retraso. Pero, la verdad sea dicha, no tenemos ni idea si vamos a tener Sociobarómetro, si saldrá a la luz alguna vez el de junio pasado, si se redactará el de diciembre (del que se hizo el trabajo de campo), si se adjudicarán a otra empresa esos trabajos auxiliares, o si tendremos que quedarnos con los que se dedican, encima, a piratear el nombre. Lo sabremos a la vuelta de Brasil, a donde viajará muy pronto el presidente.