El Gobierno de Adán Martín dio este jueves un paso de gigante en su empeño por acercar a todos los canarios a la felicidad transinsular, con eje o sin él, que tanto monta Orchilla como Pedro Barba. Seis meses después de despedir airadamente a sus consejeros del PP, el Gobierno ha descubierto (¡eureka!) que el plan Prometeo es un invento de los populares para amasar votos a base de clientelismo político. Agradecemos todos, puestos en pie y en actitud exultante, el resultado de tan sesudas pesquisas, al tiempo que recordamos que fueron muchos los medios de comunicación que desde el minuto uno de la parida dijimos lo que ahora con tanto acierto aseveran los hacedores de nuestra felicidad. De todas maneras, como de bien nacidos es ser agradecidos, muchas gracias. ¿Podrían, por ventura, echar un vistazo al Plan de Embellecimiento de Gran Canaria? De nada.