Desde el minuto uno se estaba defendiendo Soria de la corrupción, lo mismo si se le preguntaba por la última sentencia favorable al ciudadano Francisco Cabrera, que contestando a una cuestión sobre la elección de Manuel Fernández como secretario general del PP. Antes de entrar en el plató se gozó la discusión entre los periodistas acerca de los editoriales de El Día, y no dejó pasar la oportunidad de subirse al carro de la condena a pesar de que su partido no lo haya hecho aún en el Cabildo de Gran Canaria. El presidente del PP logró escabullirse de la pregunta acerca de la retirada de la publicidad institucional al periódico argumentando que eso no se puede hacer. Olvidó, suponemos que sin querer, que él ha hecho exactamente eso con este periódico, el que tiene usted en pantalla, ordenando a los consejeros del PP que retiraran toda inversión publicitaria institucional.