Se nos pasó este jueves, pero todavía estamos a tiempo de acercarles un par de simpáticas situaciones vividas el miércoles durante la presentación de nuevas unidades de la empresa Guaguas Municipales de Las Palmas. La cosa, ya desde un principio, parecía algo gafada, más que nada porque había que ver a ese pedazo de jefe de Gabinete que tiene la alcaldesa tratando de minimizar los efectos de varios grupos de ciudadanos que la achuchaban con problemas del barrio donde se celebró el acontecimiento, Santa Catalina. Luego, para adornar, a alguien se le ocurrió la feliz idea de colocar en la zona a toda la flota de vehículos de Guaguas Amarillas, el remedo que alguien se inventó para jeringar a Guaguamóvil, la compañía especializada en el transporte de personas de movilidad reducida. Los periodistas contaron y concluyeron que si allí estaba toda la flota, ¿quién demonios estaba tansportando a los usuarios? Contestación del máximo responsable: “microbuses normales y corrientes” ea, y que rechisten si quieren. Una foto es una foto, y ese día no tocaba con los minusválidos, a lo que se ve.