A pesar de algunas trapisondas que le quisieron hacer desde la dirección del auditorio Alfredo Kraus, el candidato socialista a la presidencia del Cabildo, José Miguel Pérez, pudo utilizar este miércoles la Sala Gran Canaria, donde desde hace meses se celebran los plenos de la Corporación tras quedar clausurada la Casa Palacio por las obras del nuevo edificio insular. Pérez trataba de simbolizar en ese espacio su deseo de acabar con una forma de presidir que ha sido una de las características más acusadas de José Manuel Soria. Para ello, se rodeó de una veintena de personas que tomaron la tarima del salón de plenos, donde se sientan habitualmente el presidente, el secretario y el interventor. Pérez se situó abajo, a la altura de los periodistas, y presentó los mecanismos de participación que quiere implantar. Había seis escalones, tres por la derecha y otros tantos por la izquierda.