Pues el carismático líder, que vive horas terriblemente bajas con esto de la huelga de bomberos, de los pitidos en el Estadio de Gran Canaria, de lo que se le viene encima por el istmo y por Arinaga, demostró este martes que también anda bajo de moral. Que es humano y terrícola. Sólo a esa flojera es atribuible la pájara democrática que le dio a la hora de lidiar con dos preguntas formuladas por un periodista de CANARIAS AHORA RADIO. A saber: dada la duración y características del conflicto con los bomberos, ¿se han planteado ustedes si se ha cometido algún error en el proceso negociador? Y dos, ¿dónde está Domingo Bueno, el consejero responsable de este área? La respuesta de Soria es la que cabe esperar de un líder carismático, amante de las libertades, especialmente de la de expresión y de información: “Como usted va a publicar lo que le dé la gana, me reservo mi derecho a contestarle”. Anda, como si estuviera ante un tribunal. Los que nos reservamos las acciones pertinentes por vulneración de derechos fundamentales somos nosotros, apreciado presidente, cargo público que en un acto al que hemos sido convocados formalmente como medio de comunicación acreditado, no nos atiende como es menester.