Todo el mundo en la Comunidad Autónoma sabe que el decreto que ahora se tramita tenía nombre y apellidos desde que el Parlamento aprobó una disposición transitoria de la Ley de Presupuestos para 2007 en la que se dejaban las perritas preparadas para el asunto. El decreto, por tanto, no hace más que desarrollar ese familiar deseo que anida en muchos corazones de CC de beneficiar a los suyos con el dinero de todos. La afortunada, o al menos la principal afortunada de esta medida, se llama Natalia Escuder y Gutiérrez de Salamanca, es la secretaria general técnica de la Consejería de Infraestructuras y está casada con un peso pesado de CC, Javier González Ortíz, viceconsejero de Economía y Asuntos con la Unión Europea. A partir de estos momentos queda abierta la puerta para que cualquiera que tenga posibilidades enchufe dos años seguidos o tres en total a un ser querido en un alto cargo de la Administración. Se lo agradecerá eternamente.